La presidenta de la Asamblea General de las Naciones Unidas Annalenna Baerbock afirmó que las fuerzas de paz de la ONU pueden desempeñar un papel crucial en el apoyo a una solución pacífica a la guerra en curso en Ucrania, si se llega a un tratado de paz entre Kiev y Moscú.
En una declaración a el periódico "Bild" alemán, Baerbock dijo:
"Si se llega a un tratado de paz, debe asegurarse de la mejor manera posible, y si la mayoría de los Estados miembros dicen que se requieren fuerzas de paz (cascos azules) para este propósito, eso es algo que esperamos que asegure una paz duradera".
La exministra de Relaciones Exteriores de Alemania agregó que la presencia de "cascos azules" podría ser un elemento garante para la fase posterior al conflicto, mientras continúan los esfuerzos internacionales para buscar una salida política a la crisis que dura más de tres años.
* Planes postguerra... y la condición de Moscú
Los países aliados de Ucrania han estado trabajando durante meses, especialmente entre bastidores, en proyecciones para una posible fase de transición en la guerra, que van desde un alto el fuego limitado hasta un acuerdo de paz integral.
Sin embargo, estos esfuerzos chocan con una condición básica: la disposición de Rusia a sentarse a la mesa de negociaciones, lo cual no se ha logrado hasta ahora.
Desde el estallido de la invasión rusa en febrero 2022, Ucrania ha estado exigiendo firmemente garantías de seguridad claras que le aseguren la protección de su soberanía en caso de que se detengan o terminen las operaciones militares.
* Estimaciones: la necesidad de fuerzas masivas
Algunos expertos militares y académicos creen que garantizar la estabilidad en Ucrania después de la guerra podría requerir el despliegue de fuerzas que alcancen "seis cifras", es decir, cientos de miles de soldados, ya sea de países europeos aliados o dentro de una misión de paz de la ONU.
Las opciones podrían incluir el despliegue de fuerzas de la ONU como observadores en áreas sensibles, para garantizar la implementación de los términos del acuerdo de paz y prevenir el estallido de nuevas tensiones.
* Un cargo honorario... pero con eco diplomático
Se recuerda que Annalenna Baerbock asumió oficialmente esta semana el cargo de presidenta de la Asamblea General de las Naciones Unidas, un cargo en gran medida honorario, que no le otorga poderes ejecutivos como el Secretario General de la ONU, pero que le brinda una plataforma diplomática influyente para expresar las aspiraciones de la comunidad internacional.
¿Serán los "cascos azules" el verdadero garante de la primera paz duradera en Ucrania?
La respuesta depende de la decisión de Moscú... y de la disposición del mundo para aplicar la voluntad de paz.