Tras el incidente que conmocionó a la opinión pública estadounidense, la Casa Blanca solicitó al Congreso la asignación de 58 millones de dólares adicionales para reforzar las medidas de seguridad para proteger a los altos funcionarios del país, tras el asesinato del activista político conservador Charlie Kirk en el estado de Utah.
La administración del presidente estadounidense Donald Trump confirmó que estos fondos se destinarán a proteger a los miembros de los poderes ejecutivo y judicial, en medio de un ambiente de tensión política y creciente división.
En este contexto, el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense Mike Johnson expresó su creciente preocupación, señalando que "un gran número de legisladores sienten una amenaza directa y exigen medidas más estrictas para garantizar su seguridad".
* Trump culpa a la extrema izquierda
En su primer comentario, el presidente Trump durante una entrevista con la cadena NBC News dijo que espera que "América se recupere tras este asesinato", añadiendo que la corriente de izquierda radical es responsable de este crimen.
Afirmó que el apoyo de esta corriente a las protestas violentas en el país "impide la recuperación de Estados Unidos".
* Funeral triste en Phoenix
Cientos de dolientes despidieron el cuerpo del joven activista Charlie Kirk en la ciudad de Phoenix, estado de Arizona, expresando su gran tristeza y shock por su asesinato, que abrió un amplio debate sobre la división política y la controversia en línea.
* División política en línea
Los usuarios de las redes sociales reaccionaron fuertemente al incidente; los conservadores lo consideraron "un resultado directo del creciente extremismo de izquierda", mientras que los liberales respondieron con escepticismo, señalando que Taylor Robinson, el principal acusado del crimen, es un joven con antecedentes conservadores, y su familia era parte de los partidarios del movimiento MAGA lanzado por Trump.
* Detalles de las investigaciones: motivos políticos y "de género"
Según investigaciones preliminares reportadas por el sitio Axios de seis fuentes informadas, el sospechoso Taylor Robinson (de 22 años) estaba enojado por las posiciones de Kirk sobre cuestiones de identidad de género, especialmente su oposición a la transición de menores, y su rechazo a la participación de atletas trans en competiciones femeninas.
Estas posiciones son parte del discurso conservador de Kirk que ha generado un amplio debate.
Las investigaciones también revelaron que Robinson tenía una relación con su compañero de vivienda trans, quien colaboró con las autoridades después del incidente, proporcionando conversaciones y correos electrónicos que demuestran que el crimen fue planeado, incluyendo detalles sobre la ocultación del arma utilizada después del tiroteo.
* Posible apoyo de grupos de izquierda
En un desarrollo notable, los funcionarios de la ley federal y las autoridades del estado de Utah están investigando si grupos de izquierda extremistas en el estado estaban al tanto de los planes de Robinson, o si le brindaron apoyo material o logístico después de cometer el crimen.
Informes indican que uno de estos grupos se apresuró a eliminar sus cuentas de redes sociales inmediatamente después del incidente.
* Mensaje revela la ubicación del arma
El gobernador del estado de Utah Spencer Cox declaró que Robinson envió un mensaje a su compañero de vivienda pidiéndole que recuperara su rifle que había escondido cerca de la Universidad del Valle de Utah después del crimen.
Agregó Cox que la familia del sospechoso informó a las autoridades que Robinson había mostrado un interés creciente en asuntos políticos recientemente, y estaba entusiasmado por asistir a la visita de Kirk al campus universitario.
Las investigaciones intensivas continúan en medio de crecientes preguntas sobre los motivos del crimen y sus antecedentes políticos y sociales, mientras Estados Unidos vive un evento que podría reformular el debate sobre la seguridad política y las divisiones ideológicas en el país.