El ejército filipino rechaza las llamadas al golpe y reafirma su apoyo a la constitución

El comandante del ejército filipino, el general Romeo Brawner, afirmó hoy que la institución militar rechaza cualquier intento de intervención en asuntos políticos y derrocar al presidente Ferdinand Marcos, en un momento en que las calles de Manila fueron escenario de protestas contra la corrupción gubernamental el mes pasado.
Brawner explicó que algunos oficiales retirados intentaron comunicarse con él y con oficiales más jóvenes para instar al ejército a intervenir en la política, incluyendo propuestas para llevar a cabo un golpe militar o formar un consejo militar para reajustar la sociedad, o incluso retirar el apoyo al presidente actual. Afirmó que todos estos intentos fueron completamente rechazados.
El comandante filipino señaló que se reunió con un grupo de oficiales retirados liderados por el exgeneral Romeo Bocois, conocido por sus críticas al presidente Marcos, quienes expresaron sus quejas sobre lo que describieron como la proliferación de la corrupción en el gobierno. Brawner agregó que la institución militar es "cohesiva y sólida" en su apoyo a la constitución, y que informó al presidente sobre los intentos de reclutamiento y conspiraciones.
Esto ocurre en un contexto histórico sensible, ya que el ejército retiró su apoyo al padre del actual presidente, Ferdinand Marcos Sr., en 1986, lo que llevó a una revolución popular pacífica que derrocó el régimen y posteriormente continuaron los intentos de golpe que sacudieron la incipiente democracia filipina.