El dolor se apoderó de la provincia de Alejandría, en el norte de Egipto, tras un trágico incidente en la playa "Abu Talat" en la zona de Al-Agami, donde seis chicas perdieron la vida ahogadas la mañana de ayer sábado durante un viaje escolar de una de las academias especializadas en hospitalidad aérea, mientras que 24 más resultaron heridas.
A medida que continúan las condolencias y las demandas de investigación, los usuarios de las redes sociales compartieron ampliamente un video que documenta los momentos previos a la tragedia, en el que aparece uno de los responsables de la playa dando advertencias claras a las chicas y a los supervisores, pidiendo que no se metan al mar debido a las malas condiciones climáticas y el aumento de las olas.
El responsable advirtió que las banderas rojas estaban claramente levantadas, indicando que nadar estaba completamente prohibido bajo estas condiciones peligrosas, diciendo:
"No sabemos cómo se ven las familias cuando alguien se ahoga".
Y pidiendo que se limitaran a las actividades deportivas en la playa sin arriesgarse a entrar al agua.
Sin embargo, las advertencias fueron ignoradas, ya que una de las chicas insistió en nadar, y una ola fuerte la arrastró, y cuando cinco de sus compañeras intentaron salvarla, las olas las arrastraron una tras otra, causando la tragedia en medio de un estado de pánico y confusión entre los estudiantes y los supervisores.
Una de las sobrevivientes desde el hospital dijo en un testimonio desgarrador:
"Una ola nos arruinó a todas".
Por su parte, el Ministerio de Salud egipcio anunció que el incidente resultó en la muerte de 6 estudiantes y 24 heridos, donde tres fueron atendidos en el lugar del accidente, mientras que 13 heridos fueron trasladados al hospital especializado de Al-Agami, y otros ocho al hospital general de Al-Amiriya, para recibir el tratamiento necesario.
El ministerio confirmó que los heridos están bajo protocolos médicos precisos para tratar casos de "asfixia" resultantes del ahogamiento, bajo la supervisión de equipos médicos especializados.
Esta tragedia vuelve a abrir la puerta a preguntas sobre los mecanismos de supervisión y seguridad en los viajes escolares, y el grado de cumplimiento de las instrucciones emitidas por las autoridades competentes, en medio de demandas de una investigación inmediata para responsabilizar a los negligentes y evitar la repetición de tales trágicos incidentes.