Asesinato de un activista iraní opositor en Estambul

Nazari, que era kurdo de la provincia de Kermanshah en el oeste de Irán, era conocido en los círculos religiosos sunitas kurdos y se destacó como una de las voces críticas del régimen iraní.
El incidente ha provocado reacciones generalizadas en los círculos de derechos humanos, con demandas de una investigación transparente sobre las circunstancias del asesinato, especialmente porque ocurre después de una serie de incidentes que han apuntado a opositores iraníes en el extranjero en los últimos años.