La Organización Mundial de la Salud advierte sobre una "nueva ola de adicción"... los cigarrillos electrónicos apuntan a 15 millones de adolescentes en todo el mundo

En una advertencia contundente, la Organización Mundial de la Salud reveló que más de 15 millones de adolescentes de entre 13 y 15 años consumen cigarrillos electrónicos en todo el mundo, definiendo este fenómeno como una "nueva ola de adicción" que amenaza la salud de los jóvenes, a pesar de la notable disminución en las tasas de tabaquismo tradicional.
Los datos emitidos por la organización indican que el número total de usuarios de cigarrillos electrónicos a nivel mundial ha superado los 100 millones de personas, de las cuales 86 millones son adultos, concentrándose la mayoría en los países de altos ingresos. Las cifras revelan que los jóvenes son nueve veces más propensos a probar estos productos en comparación con los adultos en los países donde se dispone de datos.
Esta advertencia llega en un momento en que las tasas de tabaquismo tradicional están disminuyendo notablemente, ya que el número de usuarios de tabaco ha caído de 1.38 mil millones en 2000 a aproximadamente 1.2 mil millones en 2024. En respuesta a esta disminución en las ventas, las principales compañías tabacaleras han comenzado a promover productos alternativos como los cigarrillos electrónicos para compensar las pérdidas. A pesar de las afirmaciones de estas empresas de que están dirigidas a fumadores adultos para ayudarles a dejar de fumar, los expertos en salud aseguran que la realidad contradice esto.
En este sentido, Étienne Krug, director del Departamento de Determinantes de la Salud de la organización, comentó: "Estos productos se comercializan como menos dañinos, pero en realidad introducen a los niños en un ciclo de adicción a la nicotina a una edad temprana, lo que socava décadas de progreso en la lucha contra el tabaquismo."
Los gobiernos de todo el mundo están tratando de encontrar un equilibrio en el manejo de estos productos. Por un lado, una revisión científica realizada por la red Cochrane en 2024 mostró que las evidencias sugieren que los cigarrillos electrónicos pueden ser una herramienta efectiva para ayudar a algunos fumadores a dejar de fumar en comparación con otras alternativas como parches o chicles. Sin embargo, la revisión también enfatizó que los datos a largo plazo son insuficientes para confirmar la seguridad de estos productos.
La región de Asia Sudeste registró la mayor disminución en las tasas de tabaquismo tradicional entre hombres, donde la proporción cayó del 70% en 2000 al 37% en 2024, contribuyendo con más de la mitad de la disminución registrada a nivel mundial. En contraste, Europa ahora lidera las tasas de uso de tabaco con un 24.1%, y sus mujeres registran la tasa de tabaquismo femenino más alta del mundo, alcanzando el 17.4%.
La Organización Mundial de la Salud advierte que uno de cada cinco adultos todavía utiliza tabaco en su forma tradicional o electrónica. La organización ha llamado a endurecer las leyes contra el tabaco y regular los nuevos productos de nicotina, enfocándose en proteger a los adolescentes de las campañas de marketing dirigidas a ellos. La organización reafirmó que "la nicotina no distingue entre un cigarrillo tradicional o electrónico... el riesgo es el mismo, y la prevención es una responsabilidad colectiva."