Naciones Unidas: Superar el umbral de 1.5 grados Celsius se ha vuelto inevitable

El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, lanzó una advertencia que fue calificada de "impactante", anunciando que el mundo está en un camino inevitable hacia superar el umbral de 1.5 grados Celsius de calentamiento global, un límite que la comunidad internacional ha estado tratando de evitar desde el Acuerdo de París sobre el clima en 2015.

Fracaso de los esfuerzos internacionales y una realidad climática sombría

Durante su discurso en la sede de la Organización Meteorológica Mundial en Ginebra, Guterres afirmó que "los esfuerzos internacionales para limitar el calentamiento global han fracasado efectivamente", señalando que superar este límite llevará al mundo a una fase de consecuencias devastadoras que incluyen inundaciones, incendios forestales y olas de calor sin precedentes.

Agregó: "El calentamiento global está empujando a nuestro planeta al borde del abismo", explicando que todos los años de la última década han sido los más cálidos en la historia registrada, mientras que las proyecciones indican un aumento de la temperatura de la Tierra de 3 grados Celsius en comparación con los niveles anteriores a la revolución industrial.

Los compromisos de los países no son suficientes

Los datos de las Naciones Unidas muestran que los compromisos actuales para reducir las emisiones —que cubren el 70% de las emisiones globales— solo buscan reducirlas en un 10% para 2035, mientras que alcanzar el objetivo de 1.5 grados requiere una reducción de al menos el 60% en el mismo período.

Llamado a la acción y a combatir el “lavado verde”

Guterres instó a los países a fortalecer los sistemas de alerta temprana para desastres y a enfrentar la desinformación y las prácticas de "lavado verde", que son las estrategias de marketing que algunas empresas utilizan para presentarse como ecológicas a pesar de sus prácticas contaminantes.

División global sobre políticas climáticas

La advertencia de Guterres llega en un momento en que se profundiza la división internacional sobre políticas climáticas, tras las declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, quien describió el cambio climático como "el mayor engaño", lo que refleja los desafíos políticos que enfrentan los esfuerzos globales para combatir la crisis ambiental.