En un trágico incidente que refleja la gravedad de la proliferación de armas en Yemen, una mujer de treinta años perdió la vida por una bala que salió accidentalmente de un rifle que su hijo de 11 años estaba manipulando, en la provincia de Al-Dhale'e, al sur del país.
El Centro de Medios de Comunicación de Seguridad, perteneciente al Ministerio del Interior del gobierno yemení reconocido internacionalmente, confirmó que la mujer de 35 años falleció de inmediato tras ser herida por un disparo en el abdomen, realizado por su hijo sin intención mientras jugaba con un rifle automático que estaba a su alcance.
La policía de Al-Dhale'e explicó que el niño no era consciente del peligro de lo que estaba haciendo, y que la bala salió repentinamente del arma mientras él jugaba con ella, impactando en el cuerpo de su madre y acabando con su vida al instante, en medio de la consternación de los miembros de la familia y los vecinos.
Las autoridades de seguridad añadieron que estos incidentes se están repitiendo de manera preocupante en varias provincias yemeníes, debido a la negligencia y a dejar las armas de fuego al alcance de los niños, además del caos de seguridad que vive el país desde el estallido de la guerra hace más de una década.
La proliferación de armas entre los civiles en Yemen se considera uno de los mayores riesgos que amenazan la vida de los ciudadanos, ya que incidentes similares han costado la vida a decenas en los últimos años, lo que resalta la urgente necesidad de campañas de concienciación comunitaria y el endurecimiento de las regulaciones relacionadas con la posesión de armas en los hogares, especialmente en un contexto de inestabilidad de seguridad.