Marco Rubio llama a Irán a conversaciones directas tras el regreso de las sanciones de la ONU

En una nueva escalada del expediente nuclear iraní, el secretario de Estado estadounidense Marco Rubio llamó ayer por la noche a Teherán a aceptar conversaciones directas con Estados Unidos "de buena fe y sin demora ni confusión", tras la reactivación de las sanciones de la ONU contra Irán.

Rubio afirmó en un comunicado oficial que "la diplomacia sigue sobre la mesa, y llegar a un nuevo acuerdo sigue siendo la mejor opción para el pueblo iraní y para el mundo".

Subrayó la necesidad de que Irán muestre seriedad y disposición para negociar directamente, al tiempo que exigió a todos los países que implementen las sanciones de inmediato.

Este desarrollo se produce tras el vencimiento del plazo del mecanismo de retorno activado por Francia, Reino Unido y Alemania a finales de agosto pasado, debido al incumplimiento de Irán de sus compromisos nucleares bajo el acuerdo firmado en 2015.

Tras la votación del Consejo de Seguridad de la ONU y el fracaso de Rusia y China el viernes para extender el plazo final, las sanciones se activaron automáticamente a las 12:00 p.m. GMT (domingo), tras diez años de suspensión bajo el acuerdo de 2015.

Las nuevas sanciones incluyen una serie de medidas estrictas, entre las que destacan :

• Congelación de activos iraníes en el extranjero

• Prohibición de la venta o compra de armas con Irán

• Castigo por cualquier desarrollo del programa de misiles balísticos

• Imposición de restricciones económicas y financieras ampliadas

Estas sanciones se activaron bajo el mecanismo de "Snapback" (Snapback) estipulado en el acuerdo nuclear iraní de 2015, que permite a cualquier país firmante volver a imponer sanciones si Teherán no cumple con el acuerdo.

El regreso de las sanciones podría complicar aún más el panorama político y diplomático entre Teherán y Washington, especialmente tras el estancamiento de las conversaciones indirectas en los últimos meses.

Ante la presión europea y el cambio de posiciones del Consejo de Seguridad, parece que Irán se encuentra en una encrucijada, ya sea volviendo a la mesa de negociaciones o enfrentando un nuevo aislamiento económico y político.