El alcalde de Estambul encarcelado enfrenta nuevos cargos de espionaje y pertenencia a una organización criminal

La oficina del fiscal en Estambul ha anunciado la apertura de una nueva investigación contra el alcalde de la ciudad, Ekrem İmamoğlu, quien actualmente se encuentra en prisión, por cargos relacionados con el espionaje y la vinculación con una organización criminal.
El comunicado del fiscal indicó que la investigación se centra en supuestas comunicaciones entre İmamoğlu y agencias de inteligencia extranjeras, además del "carácter estratégico" de su campaña electoral, considerando que algunas de sus actividades podrían encuadrarse en actos de espionaje en favor de países extranjeros.
El comunicado señaló que los equipos de investigación han analizado materiales digitales que fueron confiscados durante las operaciones de allanamiento, y se ha determinado que contienen imágenes de pasaportes pertenecientes a personas que supuestamente están vinculadas a İmamoğlu y ciudadanos extranjeros, así como el uso de aplicaciones encriptadas para intercambiar información.
En el contexto del mismo caso, se anunció la detención de Merdan Yanardağ, editor en jefe del canal TELE1, después de registrar su hogar y lugar de trabajo, donde también se le ha imputado el cargo de espionaje, en el marco de una investigación conjunta entre el servicio de inteligencia nacional turco y la policía de Estambul.
La oficina del fiscal reveló sospechas relacionadas con la filtración de datos privados de los usuarios de las aplicaciones "Istanbul Senin" y "İBB Hanım" al extranjero de manera ilegal, señalando que aproximadamente 3.7 millones de usuarios se han visto afectados por la violación, y que los datos de los votantes y las urnas han sido transmitidos a entidades extranjeras.
Según las autoridades, hasta ahora se han detenido 15 personas sospechosas de estar involucradas en la filtración de datos a través de la aplicación "İstanbul Senin" destinada a teléfonos móviles, mientras que las investigaciones continúan para identificar a los demás implicados.
Estos desarrollos se producen en medio de una ola de críticas internacionales, ya que el Ministerio de Relaciones Exteriores alemán había solicitado anteriormente un juicio justo para İmamoğlu, considerando que su arresto plantea "preguntas sobre la independencia del poder judicial turco".