Estimaciones israelíes: El plan de Trump para detener la guerra en Gaza es viable con modificaciones

Fuentes políticas en Israel estiman que el plan del presidente estadounidense Donald Trump para poner fin a la guerra en Gaza podría ser viable con modificaciones limitadas, según informó el periódico hebreo "Yediot Ahronot".
El plan incluye un amplio intercambio de prisioneros, una retirada gradual del ejército israelí y arreglos para la gestión de la franja después de la guerra.
De acuerdo con fuentes informadas, Israel considera que la mayoría de los puntos son aceptables, sin embargo, el primer ministro Benjamin Netanyahu desea modificar algunos aspectos, especialmente en lo que respecta al cierre del fondo de ayuda humanitaria para Gaza, donde insiste en su continuidad. Israel también se opone a incluir a figuras prominentes como Marwan Barghouti en el acuerdo de liberación de prisioneros.
Antes de su encuentro previsto con el presidente Trump en la Casa Blanca, Netanyahu enfrenta diversas presiones dentro de la coalición gobernante. El ministro de Seguridad Nacional Itamar Ben Gvir enfatizó la necesidad de "derrotar completamente a Hamas", mientras que el ministro de Relaciones Exteriores Gidon Sa'ar expresó su apoyo a Netanyahu, considerando que "el interés radica en poner fin a la guerra y alcanzar sus objetivos".
Los principales puntos de la iniciativa estadounidense:
Detención inmediata de las operaciones militares en Gaza.
Liberación de todos los prisioneros israelíes en un plazo de 48 horas.
Liberación de miles de prisioneros palestinos, incluidos hasta 200 condenados a cadena perpetua.
Ingreso de ayuda humanitaria amplia a través de las Naciones Unidas y organizaciones internacionales.
Recopilación de armas de Hamas por una fuerza árabe e internacional.
Retirada gradual del ejército israelí de la franja según un cronograma.
Gestión temporal de Gaza a través de un organismo árabe-internacional, seguida de la formación de un comité palestino bajo la supervisión de la Autoridad Palestina.
Creación de un corredor de seguridad alrededor de Gaza con una profundidad de entre 500 y 1000 metros.
Reconstrucción de la franja con financiamiento árabe e internacional durante más de cinco años.
Ofrecimiento de amnistía a los líderes de Hamas a cambio de su retirada y entrega de armas.
Llamado a reanudar las negociaciones directas entre Israel y los palestinos.
Los informes de los medios han aclarado que el plan prevé dos fases para la gestión temporal de la franja: la primera con un organismo internacional, seguida de un comité palestino, sin un cronograma específico para la transferencia de poder a la Autoridad Palestina. Además, el plan excluye cualquier papel de Hamas en el gobierno y no incluye un compromiso estadounidense para establecer un estado palestino, sino que solo reconoce el "anhelo de los palestinos" en esta dirección.