Gaza enfrenta un colapso sanitario y alimentario sin precedentes en medio de restricciones a la ayuda humanitaria

El director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, lanzó una advertencia contundente sobre la situación sanitaria en la Franja de Gaza, afirmando que lo que está ocurriendo en la región representa "una catástrofe sanitaria que perdurará por generaciones", en medio de un colapso casi total de la infraestructura médica y la ausencia de servicios básicos.

En declaraciones a la prensa, Ghebreyesus señaló que hay restricciones estrictas sobre la entrada de ayuda humanitaria, lo que obstaculiza los esfuerzos de socorro y agrava la crisis, instando a Israel a permitir que las organizaciones de ayuda que fueron rechazadas anteriormente regresen a trabajar dentro de la franja.

Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos confirmó que los sistemas alimentarios en Gaza están completamente destruidos, y que el acceso a necesidades básicas de alimentos, agua y medicamentos se ha vuelto peligrosamente limitado, lo que amenaza la vida de miles de civiles, especialmente niños y enfermos.

Estas declaraciones llegan en un momento en que la franja sufre una grave escasez de combustible y suministros médicos, en medio de un aumento de casos de enfermedades infecciosas, y el colapso de hospitales que operan a plena capacidad o han dejado de funcionar por completo.