¿Abre la cumbre de Doha las puertas a la confrontación? Catar en la mira de Israel y los árabes amenazan con responder

La cumbre, que se celebró días después de que se atacara a funcionarios de Hamas dentro del territorio catarí, se convirtió en una plataforma regional para redefinir la posición de Catar en la ecuación del conflicto.
Entre la simbología y la respuesta práctica
La declaración final de la cumbre llevó un tono sin precedentes en su claridad y severidad. Una condena total a la agresión, apoyo absoluto a la soberanía de Catar, y un rechazo categórico a los intentos de desplazamiento de los palestinos o de imponer un nuevo hecho consumado en Gaza.
Netanyahu ataca a Catar... y Doha responde
En un momento coincidente con la celebración de la cumbre, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu hizo declaraciones provocativas, en las que acusó a Catar de liderar esfuerzos internacionales para imponer un bloqueo a Israel, señalando lo que describió como "un bloqueo mediático financiado por Catar y China".
La respuesta catarí fue rápida y contundente, ya que el emir de Catar, Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani, describió el ataque israelí como "descarado y cobarde", afirmando que Israel "asesina al parte negociador y ataca al país mediador", en referencia al ataque a líderes de Hamas mientras se estudiaba una propuesta estadounidense para un alto el fuego.
¿La cumbre amenaza con la guerra?
A pesar de que la probabilidad de estallido de una guerra directa entre Israel y Catar sigue siendo baja, por razones relacionadas con los equilibrios de poder y la presencia estadounidense en el Golfo, la continuación de Israel en atacar a los mediadores y su ignorancia del derecho internacional podría llevar a algunos países a reconsiderar sus estrategias de respuesta, especialmente si las agresiones se repiten o se expanden para incluir a otros países.
Lo que distingue a la cumbre de Doha es que no fue solo una reunión de emergencia, sino una declaración clara de que la época del silencio ha terminado, y que el ataque a cualquier país árabe o islámico no pasará sin respuesta.