El primer presidente francés tras las rejas.. Macron se reúne con Sarkozy antes de su encarcelamiento

Antes de su ingreso a prisión programado para el 21 de octubre, el presidente francés Emmanuel Macron recibió a su predecesor Nicolas Sarkozy en el Palacio del Elíseo, en un encuentro de despedida que despertó el interés de los círculos políticos y mediáticos franceses, según informó el canal TF1.
La justicia francesa había condenado a Sarkozy el 25 de septiembre pasado por financiación ilegal de su campaña electoral de 2007, a través de fondos que se cree provinieron del régimen del fallecido líder libio Muamar Gadafi. Según la sentencia, Sarkozy se convertirá en el primer presidente francés -y el primer presidente de la Unión Europea- en cumplir efectivamente una condena de prisión tras las rejas.
Se prevé que el expresidente sea recluido en la prisión "La Santé" en la capital París, dentro de un área de aislamiento destinada a personalidades destacadas, donde su celda tendrá aproximadamente nueve metros cuadrados, para su protección y para evitar cualquier contacto con otros prisioneros.
En una entrevista con el periódico Le Figaro, Sarkozy dijo que ingresará a prisión "con la cabeza en alto", llevando consigo el libro del conde de Montecristo y la biografía de Jesucristo, en una referencia simbólica a la paciencia y la inocencia.
Por su parte, su equipo de defensa confirmó que presentará una solicitud inmediata para su liberación, señalando que el tribunal de apelación podría decidir sobre la solicitud en un plazo máximo de dos meses, y tal vez antes. Según la ley, no se puede mantenerlo en detención a menos que existan razones excepcionales relacionadas con la prevención de la influencia sobre los testigos o el riesgo de fuga o repetición del delito.
Si estas justificaciones no se demuestran, es probable que Sarkozy sea liberado bajo supervisión judicial o se le imponga arresto domiciliario con un grillete electrónico.