El gobierno talibán ha comenzado a implementar medidas amplias para restringir el acceso a internet de alta velocidad en todo el país, incluyendo la prohibición total del servicio de fibra óptica y el corte de la red de internet inalámbrico (Wi-Fi) en la ciudad de Mazar-i-Sharif, en la provincia de Balkh, al norte de Afganistán.
Los residentes de la provincia de Balkh confirmaron que el movimiento talibán comenzó hace días a racionar los servicios de internet gradualmente, antes de cortarlo por completo ayer lunes, con confirmaciones de las empresas de telecomunicaciones de que la decisión fue ordenada directamente por las autoridades locales, basándose en las instrucciones del líder talibán Hibatullah Akhundzada.
Los talibanes justificaron este paso con el argumento de "prevenir la inmoralidad y los vicios", señalando que anteriormente habían intentado prohibir aplicaciones como "TikTok" y "Pubg", pero el alto costo de la prohibición, que asciende a aproximadamente 100 mil dólares mensuales, impidió su implementación.
Fuentes locales informaron que los servicios de internet doméstico y de oficina se han detenido por completo, mientras que el internet a través de teléfonos móviles sigue disponible pero con velocidades muy limitadas.
El Haji Zaid, portavoz del gobernador de Balkh, explicó que esta decisión es una instrucción directa de Hibatullah Akhundzada con el objetivo de limitar las desviaciones sociales, añadiendo que el gobierno busca encontrar una alternativa interna al internet.
Fuentes dentro de los talibanes confirmaron que la decisión de cortar el internet inalámbrico se tomó en una reunión entre el gobernador de la provincia de Balkh Mohammad Yusuf Wafa y los responsables de las empresas de telecomunicaciones, quienes fueron informados de que la decisión provenía del líder talibán y debía implementarse de inmediato.
Al mismo tiempo, un grupo de ministros talibanes se prepara para dirigirse a Kandahar en los próximos días para intentar convencer a Hibatullah Akhundzada de revertir la decisión, debido a los grandes riesgos que representa para los jóvenes y la sociedad en general, además de interrumpir el trabajo de las instituciones gubernamentales y aduanas, y su impacto negativo en los proyectos económicos.
Se espera que estas medidas se amplíen para incluir otras provincias de Afganistán pronto, con el objetivo de imponer restricciones más severas a los servicios de internet rápido en todo el país.
Cabe señalar que el movimiento talibán, que tomó el poder el 15 de agosto de 2021 tras la retirada de las tropas estadounidenses, ha impuesto restricciones estrictas y severas en la vida diaria, especialmente en los derechos de las mujeres y las niñas, así como ha aplicado sus duras leyes en todos los aspectos de la vida en el país.