Moscú anuncia reclutamiento obligatorio en otoño de 2025 y acusa a entidades externas de campañas de desinformación

Las autoridades rusas anunciaron el lunes una serie de medidas y decisiones en los ámbitos interno y externo, en un momento en que la confrontación con Ucrania experimenta una nueva escalada en el discurso occidental.
El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó un decreto que obliga a reclutar a los ciudadanos rusos de manera obligatoria durante el período del 1 de octubre al 31 de diciembre de 2025. El decreto fue publicado en el portal oficial de información legal.
El decreto establece que "estarán sujetos al reclutamiento obligatorio durante el período del 1 de octubre al 31 de diciembre de 2025, los ciudadanos rusos que tengan entre 18 y 30 años, y que no estén en la reserva, con un total de 135 mil personas". También se establece el despido de los militares cuya duración de servicio haya terminado.
En este contexto, el Consejo de Seguridad ruso reveló acusaciones contra entidades externas por contratar organizaciones de oposición en el país. El consejo declaró en su comunicado: "Entidades externas están utilizando activamente las capacidades de la oposición liberal, nacionalista y otras organizaciones para difundir materiales provocativos con el objetivo de desestabilizar y manipular la opinión pública, y sembrar discordia en la sociedad. Se presta especial atención a los casos de publicación deliberada de información no confiable, que distorsiona la imagen de las políticas internas y externas de Rusia".
Por su parte, la portavoz oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zakharova, comentó sobre el panorama mediático global, afirmando que los países occidentales "están poniendo en peligro el espacio mediático global en su intento de erradicar cualquier manifestación de opinión contraria". Aseguró que los gobiernos de los países occidentales "no podrán protegerse para siempre de las verdades incómodas, y la gente seguirá encontrando formas de superar las barreras en el ámbito de la información".
Esto ocurre en un momento en que aumentan las declaraciones estadounidenses relacionadas con la guerra en Ucrania. El enviado estadounidense a Ucrania, Keith Kellogg, dijo en declaraciones a la cadena "Fox News" el domingo que atacar el profundo territorio ruso con armas estadounidenses es una "hipótesis plausible".
Al ser preguntado si el presidente estadounidense Donald Trump había permitido a Ucrania usar misiles de largo alcance contra Rusia, Kellogg respondió: "Con base en lo que dijeron Donald Trump, el vicepresidente JD Vance y el secretario de Estado Marco Rubio, la respuesta es sí". Continuó: "Usen las capacidades para atacar en profundidad. No hay fortalezas inexpugnables".
Por su parte, el vicepresidente estadounidense, JD Vance, en declaraciones separadas a "Fox News", dijo que Washington está considerando la posibilidad de vender misiles de largo alcance "Tomahawk" a los europeos para su entrega a Ucrania. Vance declaró: "Como dijo el presidente Trump, estamos discutiendo el asunto", señalando que Washington está considerando "una serie de demandas europeas" y que el presidente tomará "la decisión final que sirva al interés superior de Estados Unidos".
Moscú se apresuró a minimizar el impacto de estas declaraciones. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, durante una rueda de prensa el lunes, dijo: "No hay antídoto capaz de resolver la situación en el frente para el régimen de Kiev. No hay arma mágica, ya sean misiles Tomahawk u otros. No cambian nada".
Parece que estas declaraciones estadounidenses reflejan un cambio en la postura, después de que el presidente Trump dijera la semana pasada que Ucrania podría recuperar todo su territorio de Rusia "e incluso más allá", en una modificación de declaraciones anteriores en las que se refería a la posibilidad de que Kiev cediera parte de su territorio. También su vicepresidente, Vance, comentó sobre el creciente impaciencia de Trump hacia Moscú, mientras que el secretario de Estado Marco Rubio instó a su homólogo ruso a detener lo que calificó de "masacre" en Ucrania.