Innovación en implante de retina inalámbrica que restaura la visión central en personas ciegas debido a la degeneración macular avanzada

En un avance científico sin precedentes, científicos han logrado desarrollar un nuevo implante ocular que permite a los pacientes que sufren de ceguera debido a la degeneración macular avanzada recuperar parcialmente su visión central, abriendo nuevas perspectivas para tratar una de las principales causas de pérdida de visión en todo el mundo.
Un estudio pionero publicado el lunes en la revista "New England Journal of Medicine" reveló resultados impresionantes de la nueva técnica, donde el 81% de los participantes con etapas avanzadas de degeneración macular relacionada con la edad mostraron una mejora significativa en su capacidad visual.
El sistema innovador se basa en una cámara montada en unas gafas especiales que captura imágenes y las proyecta en un pequeño implante de retina inalámbrico que no supera los 2×2 milímetros, convirtiendo la luz en pulsos eléctricos que se envían al cerebro, permitiendo a los pacientes recuperar parte de la visión central necesaria para leer y realizar tareas diarias.
El profesor Frank Holtz, investigador principal del estudio y jefe del departamento de oftalmología en el Hospital Universitario de Bonn, afirmó: "Este estudio confirma que por primera vez podemos restaurar la visión central funcional en pacientes que han perdido la vista debido a la atrofia geográfica. Esta innovación representa un cambio radical en el tratamiento de las etapas avanzadas de la degeneración macular".
Los resultados de los ensayos que incluyeron a 32 pacientes mostraron que el 84% de ellos pudieron utilizar la visión artificial en sus hogares para leer números o palabras. Además, el rendimiento de los participantes mejoró en promedio en 25 letras (equivalente a cinco líneas) en las tablas de agudeza visual tradicionales, mientras que uno de los participantes logró mejorar su capacidad leyendo 59 letras adicionales (aproximadamente 12 líneas).
El profesor José-Alan Sahel, coautor del estudio y jefe del departamento de oftalmología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh, añadió: "Es la primera vez que cualquier proyecto para restaurar la visión logra tales resultados en un gran número de pacientes. Más del 80% de los participantes pudieron leer letras y palabras, y algunos pudieron leer páginas de libros".
La investigación fue financiada por la empresa estadounidense "Science Corporation", fabricante del dispositivo, diseñado por el profesor Daniel Palanker de la Universidad de Stanford. La empresa ha solicitado aprobaciones para el uso clínico en Estados Unidos y Europa, asegurando su compromiso de establecer un precio justo y accesible que permita beneficiar al mayor número posible de pacientes.