Cumbre esperada entre Trump y Putin en Budapest en dos semanas

El presidente estadounidense Donald Trump anunció que se reunirá con su homólogo ruso Vladimir Putin en la capital húngara Budapest durante las próximas dos semanas, en un desarrollo sorprendente que coincide con la visita del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky a la Casa Blanca.
Zelensky espera convencer a Washington de suministrar a Kiev misiles Tomahawk de largo alcance para fortalecer las capacidades del ejército ucraniano frente a la escalada rusa.
Advertencia rusa sobre el suministro de misiles a Kiev
El anuncio de la cumbre se produjo tras una llamada telefónica entre Trump y Putin, durante la cual este último advirtió que la entrega de estos misiles estadounidenses a Kiev causaría “un daño grave” a las relaciones entre Moscú y Washington.
Yuri Ushakov, principal asesor del presidente ruso, explicó que Putin enfatizó durante la llamada que los misiles Tomahawk “no cambiarán la situación en el terreno en Ucrania, pero obstaculizarán las oportunidades de llegar a un acuerdo pacífico”.
El alcance del misil Tomahawk BGM-109 es de aproximadamente 1600 kilómetros, y puede volar a una velocidad de 880 kilómetros por hora a una altitud muy baja sobre la superficie de la tierra.
Trump: No estamos listos para agotar nuestras reservas
Por su parte, el presidente estadounidense se mostró cauteloso respecto a la idea de entregar estos misiles a Ucrania, y dijo ante los periodistas en la Oficina Oval: “No podemos agotar las reservas de nuestro país... También las necesitamos, así que no sé qué podemos hacer en este momento.”
En una publicación a través de su plataforma de redes sociales Truth Social, Trump mencionó un “gran progreso” durante la llamada telefónica con Putin, afirmando que el diálogo fue “franco y basado en la confianza mutua”.
Preparativos para la cumbre esperada
Trump reveló que los ministros de Relaciones Exteriores de ambos países llevarán a cabo una reunión preparatoria la próxima semana, liderada por el lado estadounidense por Marco Rubio.
Agregó: “Después de las reuniones iniciales, me reuniré con el presidente Putin en Budapest para ver si podemos poner fin a esta guerra deshonrosa entre Rusia y Ucrania.”
Por su parte, Yuri Ushakov confirmó que los preparativos para la cumbre ya han comenzado, señalando que Budapest es un fuerte candidato para albergar el encuentro.
Regreso del calor tras la frialdad en las relaciones
Estos desarrollos ocurren después de un período de frialdad entre los líderes desde su cumbre anterior en Alaska a mediados de agosto pasado, que terminó sin avances significativos sobre la guerra en Ucrania.
Los observadores consideran que la reciente llamada refleja el inicio del regreso del calor a las relaciones ruso-estadounidenses, especialmente en un contexto de deseo mutuo de reanudar el diálogo político tras meses de estancamiento.
Apoyo húngaro para el encuentro
El primer ministro húngaro Viktor Orbán, conocido por su cercanía tanto a Trump como a Putin, dio la bienvenida a la cumbre esperada, escribiendo en la plataforma X (anteriormente Twitter) “¡Estamos listos!”.
Los analistas ven la elección de Budapest como sede de la cumbre como un símbolo del papel de Hungría como posible mediador en los esfuerzos para poner fin a la guerra que ha estado en curso en Ucrania durante más de tres años.