Una operación de seguridad de calidad en Alepo derriba a los traficantes de drogas y elimina a uno de los principales buscados
En el marco de sus esfuerzos para combatir el crimen y restablecer la seguridad, las fuerzas de seguridad interna de la provincia de Alepo llevaron a cabo una amplia operación de campo que tuvo como objetivo el barrio del campamento de Nairab, basada en información de inteligencia precisa que fue recopilada y analizada previamente.
La operación dio resultados inmediatos, ya que se persiguió a varios buscados por cargos de tráfico de sustancias narcóticas. El desarrollo de los acontecimientos durante la ejecución condujo a un trágico incidente, donde uno de los buscados disparó contra uno de los agentes mientras intentaba escapar al ser detenido.
En este sentido, el jefe de seguridad interna de la provincia de Alepo, el coronel Mohamed Abdel Ghani, declaró a la agencia "SANA": "Uno de los buscados intentó huir al ser detenido durante la operación, lo que requirió la intervención de uno de los agentes que disparó en su dirección, resultando en su muerte".
Para garantizar la justicia y la integridad, el coronel Abdel Ghani afirmó en su declaración que "el agente que disparó ha sido remitido a investigación y a las autoridades judiciales competentes para asegurar la rendición de cuentas de acuerdo con las disposiciones de la ley".
El líder de seguridad reveló el trasfondo criminal del buscado, señalando que "es considerado uno de los fugitivos de la justicia, involucrado en varios casos, siendo el más destacado la gestión de redes de contrabando y tráfico de drogas, y existen varias órdenes de búsqueda emitidas por las autoridades judiciales competentes".
Las fuerzas no se limitaron a la primera operación, ya que el coronel Abdel Ghani indicó que las fuerzas de seguridad interna comenzaron a desplegar refuerzos adicionales en el barrio para garantizar la captura de otros buscados y prevenir cualquier amenaza a la seguridad pública, arrestando a varios de ellos y remitiéndolos a investigación.
Al concluir su declaración, el coronel Mohamed Abdel Ghani reiteró el compromiso de la dirección de seguridad interna de proteger la seguridad y la integridad de los ciudadanos, afirmando que "las operaciones continuarán de manera constante para perseguir a los demás y capturarlos". También indicó que "el expediente completo será remitido a las autoridades judiciales competentes para responsabilizar a todos los involucrados de acuerdo con los procedimientos legales", lo que confirma que las acciones se llevan a cabo dentro del marco legal establecido.
