Exfuncionario sirio revela la implicación de Assad en el asesinato del periodista estadounidense Austin Tice.

Una investigación secreta estadounidense, cuyos detalles fueron publicados en el periódico "The Washington Post", reveló que el exfuncionario de seguridad sirio Bassam al-Hassan, uno de los más cercanos a Bashar al-Assad, fue sometido a un intenso interrogatorio en Beirut a principios de abril pasado, en presencia de funcionarios libaneses y representantes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Según fuentes estadounidenses citadas en la investigación, Bassam al-Hassan proporcionó información impactante que indica que Bashar al-Assad emitió órdenes personales en 2013 para matar al periodista estadounidense Austin Tice, después de que este último intentara escapar de su prisión sin éxito. Al-Hassan afirmó que ejecutó la orden a través de uno de sus asistentes, a pesar de sus intentos, según su afirmación, de convencer a Assad de retractarse de la decisión.
Según "The Washington Post", al-Hassan justificó sus intentos como "razones políticas", considerando que mantener a Tice como rehén sería una "carta de presión" contra los Estados Unidos. Sin embargo, una fuente informada describió esta narrativa como un intento de al-Hassan de "desvincularse de la responsabilidad", confirmando que la información que implica a Assad "parece confiable debido a la posición central de al-Hassan en el régimen anterior".
El periódico señaló que las investigaciones estadounidenses aún están en curso para verificar la veracidad de estas confesiones, mientras que el FBI intenta determinar la ubicación exacta de los restos de Tice, que han sido descritos de manera diferente en las narrativas de al-Hassan, pero siguen estando vinculados a una zona cercana a Damasco.
Por su parte, funcionarios estadounidenses consideraron que esta información, si se confirma, podría representar una "penetración cualitativa" en uno de los asuntos más complicados en las relaciones sirio-estadounidenses, con expectativas de una cooperación intensa entre Washington y el gobierno sirio de transición para revelar el destino del periodista, desaparecido desde 2012.
Por otro lado, "The New York Times" publicó un extenso informe basado en entrevistas con más de una decena de funcionarios estadounidenses actuales y anteriores, confirmando que Bassam al-Hassan había sido uno de los principales sospechosos en el caso de Tice durante años, siendo considerado por la inteligencia estadounidense como un "actor clave" en su arresto.
El informe citó a un alto funcionario estadounidense advirtiendo sobre la ingenuidad de aceptar las declaraciones de al-Hassan, debido a la posibilidad de que busque "culpar completamente a Assad" para eximirse a sí mismo. Además, fuentes revelaron que el nombre de al-Hassan estaba en una lista entregada por la administración Biden al nuevo gobierno sirio para ayudar a descubrir la verdad.