China llama a establecer una organización mundial para la gobernanza de la inteligencia artificial en medio de la creciente competencia tecnológica

El primer ministro chino, Li Keqiang, hizo un llamado a la creación de una organización internacional para la cooperación en el campo de la inteligencia artificial durante su discurso en la Conferencia Mundial de Inteligencia Artificial en la ciudad de Shanghái, que contó con la amplia presencia de líderes de la industria y tomadores de decisiones.
Li Keqiang afirmó que "la gobernanza global de la inteligencia artificial sigue siendo fragmentada, con grandes disparidades entre los países en las normas regulatorias e institucionales", enfatizando la necesidad de trabajar en un "marco de gobernanza global que goce de un amplio consenso".
Este llamado se produce en un momento en que las relaciones tecnológicas entre China y Estados Unidos están experimentando una creciente tensión, especialmente después de que Washington impusiera restricciones a la exportación de chips avanzados a China, incluidos los chips de inteligencia artificial de empresas estadounidenses como Nvidia, ante el temor de que se utilicen para fortalecer capacidades militares.
A pesar de estas restricciones, China continúa avanzando significativamente en el campo de la inteligencia artificial, lo que preocupa a Washington. El primer ministro chino señaló los desafíos que enfrenta el desarrollo de esta tecnología, como la escasez de suministro de chips y las restricciones al intercambio de habilidades, expresando la disposición de su país para compartir sus experiencias con los países del Sur global.
En un contexto relacionado, la empresa Nvidia emitió un comunicado el pasado jueves 24 de julio, advirtiendo que construir centros de datos utilizando sus chips electrónicos de contrabando es un "trato perdedor", y asegurando que solo brinda soporte técnico para sus productos con licencia.
El comunicado fue en respuesta a un informe publicado por el periódico británico Financial Times que revelaba que chips de inteligencia artificial de la compañía por un valor de al menos mil millones de dólares habían ingresado ilegalmente a China a pesar de las restricciones estadounidenses.
El periódico citó fuentes informadas que indicaron que los chips "B200" prohibidos para la venta a China se habían extendido en el mercado negro, donde distribuidores chinos comenzaron a venderlos a proveedores de centros de datos desde mayo pasado, incluidos grupos que trabajan en el campo de la inteligencia artificial.
Esto ocurrió después de que la administración liderada por Donald Trump impusiera restricciones al envío de chips "H2O" avanzados a China como parte de la política de limitar la transferencia de tecnología avanzada.