En medio de una ola de expectación y sorpresa, han surgido recientemente noticias emocionantes sobre un proyecto excepcional que podría ver la luz pronto en la capital siria, Damasco: una torre que llevará el nombre del presidente estadounidense Donald Trump.
Estas noticias ya no son solo rumores, ya que el grupo inmobiliario "Tiger" ha anunciado su intención de llevar a cabo el proyecto, basándose en lo que describen como un cambio crucial en las relaciones internacionales, tras la decisión del presidente estadounidense de levantar las sanciones contra Siria, en respuesta a la solicitud del príncipe heredero saudí, el príncipe Mohammed bin Salman, durante una cumbre en Riad.
Walid Al-Zuabi, presidente del grupo Tiger, declaró al periódico "The Guardian" que el ambicioso proyecto incluirá un rascacielos de 45 pisos con un costo estimado de 200 millones de dólares.
Explicó que el proyecto será un símbolo de paz y un mensaje al mundo de que Siria merece un futuro brillante después de años de guerra, señalando que la empresa está considerando varios sitios posibles para la construcción en Damasco, con la posibilidad de ajustar el número de pisos según el plan final.
Al-Zuabi confirmó que la empresa presentará una solicitud oficial para obtener los permisos de construcción esta semana, aunque el uso del nombre "Trump" requiere la aprobación de la marca comercial del expresidente estadounidense, un aspecto en el que la empresa está trabajando actualmente para asegurarlo a través de un acuerdo de licencia.
También señaló que el proceso de construcción podría llevar tres años después de completar los procedimientos legales y obtener las aprobaciones necesarias.
Según Al-Zuabi, se llevó a cabo una reunión en enero con el presidente sirio Ahmed Al-Shar'a, donde se discutió el proyecto.
La reunión tuvo lugar en el contexto de una nueva etapa en Siria, donde a pesar de las sanciones estadounidenses durante un tiempo, la reciente decisión de levantarlas representa un gran cambio que allana el camino para que el país regrese a la escena de la inversión internacional.
En un toque que refleja el lujo del proyecto, Al-Zuabi mencionó que el nombre "Trump" se grabará en oro en la fachada de la torre, que describió como un "monumento brillante" que devolverá a Siria al centro de atención después de años de aislamiento.
Con este paso audaz, la idea de la Torre Trump pasa de ser una mera especulación a una posibilidad real que podría cambiar la imagen de Damasco en el mapa económico y político mundial, en medio de un escenario regional cambiante y nuevas alianzas que se están formando sobre las ruinas de conflictos antiguos.