La cifra de víctimas de las devastadoras inundaciones que golpearon el estado estadounidense de Texas ha aumentado a al menos 120 muertos, según informaron las autoridades locales el jueves, citadas por los medios de comunicación estadounidenses.
Las autoridades explicaron que solo el condado de Kerr ha presenciado la muerte de 96 personas, incluidos 36 niños, muchos de los cuales perdieron la vida en un campamento de verano para niñas.
Al mismo tiempo, continúan las labores de búsqueda para encontrar al menos a 160 personas que figuran como desaparecidas.
Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció que más de 2200 personas siguen en áreas dispersas del estado directamente afectadas por las inundaciones.
Abbott declaró en un comunicado oficial: "Las condiciones de las inundaciones provocadas por las tormentas de la semana pasada siguen afectando a amplias áreas, incluyendo el centro de Texas, Hill Country, Big Country y el valle de Concho".
Las autoridades continúan brindando apoyo y ayuda a las áreas afectadas, mientras continúan las operaciones de búsqueda y rescate en medio de un estado de profunda tristeza y máxima alerta.