El presidente estadounidense Donald Trump anunció hoy sábado que Estados Unidos y Rusia están muy cerca de llegar a un acuerdo sobre la crisis ucraniana, tras una cumbre sin precedentes que tuvo con el presidente ruso Vladimir Putin en Alaska.
Trump dijo en una entrevista con la cadena "Fox News" que se reunió a solas con Putin en la base militar Elmendorf-Richardson en Anchorage, y que la reunión duró dos horas y 45 minutos, describiéndola como "muy exitosa". Agregó: "Le doy a mi reunión con Putin un 10 de 10. Negociamos sobre muchos temas importantes, y todavía hay uno o dos puntos que necesitan resolverse".
Trump confirmó que se está preparando pronto una reunión trilateral que lo reunirá con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky y el presidente ruso Vladimir Putin, enfatizando la importancia de que los países europeos participen en estas conversaciones.
Continuó: "Creo que estamos muy cerca de llegar a un acuerdo, y Ucrania debe aceptar, aunque tal vez no lo haga, pero mi consejo al presidente Zelensky es que firme este acuerdo". Aclaró que los puntos discutidos incluyeron cuestiones relacionadas con la OTAN, la seguridad regional y asuntos territoriales.
En una conferencia de prensa conjunta tras la cumbre, Trump dijo: "Hemos logrado un gran progreso, y hay muchos puntos en los que hemos coincidido, pero aún queda trabajo por hacer. Queremos superar las diferencias con Rusia, y estamos en el camino correcto para resolver la mayoría de los problemas".
Agregó: "Informaré al presidente Zelensky y a los líderes europeos sobre los resultados de la reunión en Alaska".
Por su parte, el portavoz del Kremlin Dmitry Peskov describió las conversaciones entre Putin y Trump como "muy positivas", señalando que abren la puerta a "continuar buscando opciones para la resolución".
Agregó: "La conversación entre los presidentes nos permite avanzar con confianza en la búsqueda de soluciones".
Asimismo, el embajador ruso en Estados Unidos Alexander Darchiev confirmó que se llevarán a cabo nuevas consultas entre Moscú y Washington pronto para abordar los puntos de tensión en las relaciones bilaterales, dentro de un esfuerzo más amplio para normalizar las relaciones.
La cumbre en Alaska experimentó cambios en su agenda; en lugar de una reunión cerrada entre los presidentes y solo los traductores, se amplió la reunión para incluir a tres de cada lado.
Trump estuvo acompañado por el secretario de Estado Marco Rubio y el enviado especial Steve Witkoff, mientras que Putin estuvo acompañado por el secretario de Estado Sergey Lavrov y su asesor de política exterior Yuri Ushakov.
Se había previsto una reunión ampliada durante un almuerzo, pero fue cancelada en el último momento.
Al final de la cumbre, Putin extendió una invitación oficial a Trump para visitar Moscú, diciendo: "La próxima reunión será en Moscú".