El papel de la diplomacia francesa en el archivo sirio es efectivo a pesar de la congestión

Se considera que el enfoque es multidimensional, ya que en el ámbito político se ha impulsado el diálogo entre el gobierno interino y los componentes sirios, y en el ámbito de la seguridad se ha centrado en la lucha contra el terrorismo y la estabilización, mientras que en el ámbito de los derechos se insiste en la exigencia de rendir cuentas a los perpetradores de violaciones.
Francia trabaja para invertir en las relaciones históricas y utilizar la "poder blando" francés (lingüístico, cultural, educativo) para fortalecer su influencia y asegurarse de estar presente en el este del Mediterráneo a través de los archivos sirio y libanés.
Existen varios desafíos que enfrenta la diplomacia francesa, encabezados por la congestión regional y la competencia de intereses estadounidenses, rusos, turcos e iraníes, así como la limitada capacidad para imponer políticas sobre el terreno y la falta de una posición unificada de la Unión Europea hacia Siria.
París depende de la diplomacia simbólica, como la presencia en las negociaciones sin una capacidad real para imponer soluciones y combinar canales oficiales y no oficiales, y se interesa por el posicionamiento geopolítico a través del fortalecimiento del papel francés en el Mashreq árabe.
París puede haber tenido éxito en reintegrar a Siria en el escenario diplomático internacional y ha mantenido canales de comunicación con todas las partes, pero de manera limitada en el terreno, ya que depende casi por completo del poder blando frente a fuerzas que poseen herramientas duras.
De aquí se resume su capacidad para fortalecer su influencia a través de su éxito en reavivar las negociaciones entre Damasco y las "QSD" y el grado de disposición de las grandes potencias (especialmente Estados Unidos) para aceptar su mediación.
Además de su capacidad para ofrecer incentivos tangibles a las partes sirias.
Francia sigue siendo un jugador secundario en comparación con las grandes potencias activas en Siria, pero su diplomacia flexible le brinda la oportunidad de mantener una presencia en uno de los archivos más complejos de la región.