Las fuerzas rusas lanzaron en la madrugada de este jueves una serie de ataques intensivos utilizando drones de combate y misiles, que apuntaron a varias ciudades ucranianas, en una nueva escalada que ocurre a pesar de los esfuerzos internacionales continuos para encontrar una solución pacífica al conflicto.
El periódico Kyiv Independent informó que las explosiones resonaron en la capital, Kiev, y en la ciudad de Leópolis, al oeste del país, según lo que reportó la agencia RBC-Ucrania, que confirmó la activación de los sistemas de defensa aérea en las áreas atacadas.
El gobernador militar de la región de Leópolis, Maksym Kozytskyi, explicó que las defensas aéreas están trabajando activamente para contrarrestar los ataques, en medio de advertencias repetidas a los habitantes de la necesidad de permanecer en refugios.
Las autoridades ucranianas habían emitido una alerta aérea general en Kiev la noche del miércoles, mientras los ataques aéreos con drones continuaron durante toda la noche.
Aún no se han proporcionado detalles precisos sobre el número de víctimas o la magnitud de los daños causados por el bombardeo.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso anunció que sus fuerzas derribaron 49 drones ucranianos durante la noche pasada, en el espacio aéreo de la península de Crimea y otras regiones rusas que incluyeron Rostov, Vorónezh, Bélgorod, Briansk, Kaluga, Oriol, Kursk y Tula, además de áreas sobre las aguas del mar Negro.
Esta escalada ocurre en medio de los esfuerzos diplomáticos liderados por el presidente estadounidense Donald Trump para encontrar una salida a la crisis.
Trump ha llevado a cabo una serie de reuniones en los últimos días, comenzando el viernes pasado en Alaska con un encuentro con el presidente ruso Vladimir Putin, seguido de una reunión en Washington el lunes con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, con la participación de varios líderes europeos.
La administración estadounidense busca organizar un encuentro directo entre Putin y Zelenski, en medio de conversaciones sobre la posibilidad de celebrar una cumbre tripartita que incluya a Trump junto a ellos, en un intento por impulsar las negociaciones estancadas.
En un contexto relacionado, el gobierno ucraniano anunció el miércoles que ha comenzado a trabajar en un concepto integral para la seguridad nacional en la etapa posterior a la guerra.
El jefe de la oficina de la presidencia ucraniana, Andriy Yermak, publicó en la plataforma "X" que los equipos ucranianos liderados por el ejército han comenzado a trabajar en la preparación del componente militar para las garantías de seguridad futuras.
Yermak agregó: "Estamos preparando un plan integral de las acciones que deben tomarse en caso de que Rusia decida continuar prolongando la guerra o frustrar los acuerdos relacionados con las reuniones bilaterales y trilaterales".
Yermak afirmó que ha mantenido consultas con asesores de seguridad nacional en Alemania, Italia, Francia, Reino Unido, Finlandia, la Unión Europea y la OTAN, tras su regreso de Washington, subrayando que "Ucrania está lista para cualquier fórmula de diálogo que logre un final justo para la guerra".
Concluyó diciendo: "Rusia debe elegir entre involucrarse seriamente en el proceso de paz o enfrentar presiones internacionales dolorosas y crecientes", señalando que la coordinación con los socios internacionales continuará las 24 horas para garantizar la unidad de posiciones y aumentar la presión política y diplomática.