En una conferencia de prensa celebrada el pasado martes en las nuevas instalaciones de detención de inmigrantes "Aligator Alcatraz" en Oshopee, Florida, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, advirtió al multimillonario Elon Musk sobre los peligros de establecer un nuevo partido político, considerando que este paso podría tener consecuencias negativas y otorgar a los demócratas el control del Senado y la Cámara de Representantes.
DeSantis instó a Musk a dirigir sus recursos e influencia hacia cuestiones más impactantes y sostenibles, como buscar la aprobación de una enmienda constitucional que obligue al gobierno federal a mantener un presupuesto equilibrado.
Explicó que 28 estados estadounidenses ya han aprobado esta enmienda, y que una vez que 34 estados lo aprueben, se puede redactar oficialmente y someterlo a la ratificación por tres cuartas partes de los estados, según lo establecido en la Quinta Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.
DeSantis dijo: "Si Elon quiere tener un impacto real, esta es la forma ideal de lograrlo".
El gobernador señaló que la formación de un tercer partido solo serviría para dispersar los votos conservadores, lo que contribuiría a aumentar las posibilidades de victoria de los demócratas en las elecciones.
Agregó que el problema no radica solo en el partido rival, sino en el desempeño del propio Partido Republicano en el Congreso, donde sus miembros hablan constantemente sobre controlar el gasto, pero no lo cumplen en la práctica una vez que asumen sus cargos.
DeSantis criticó la vacilación de los miembros del Congreso para apoyar recortes significativos en el presupuesto gubernamental, afirmando que no han mostrado entusiasmo por reducir el gasto ni respaldaron las órdenes ejecutivas de Trump relacionadas con la inmigración y otros asuntos, a pesar de su importancia legal y ejecutiva.
Concluyó diciendo que cambiar la realidad política y financiera en Washington requiere una reforma constitucional real, no solo intentos políticos superficiales.