La portavoz de la Casa Blanca, Caroline Levitt, confirmó ayer miércoles que el presidente estadounidense Donald Trump "está abierto a reunirse con el presidente ruso Vladimir Putin y el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, al mismo tiempo", en un paso que se describe como un posible gran cambio en los esfuerzos por poner fin a la guerra en curso en Ucrania.
Levitt dijo que "la parte rusa ha expresado su deseo de reunirse con el presidente estadounidense", lo que refuerza la posibilidad de reuniones directas entre las partes en los próximos días.
Por su parte, el presidente Trump elogió los resultados de las conversaciones que su enviado especial a Rusia, Steve Witkoff, tuvo con el presidente Putin, describiéndolas como "muy productivas".
Trump dijo en una publicación en la plataforma "Truth Social":
"Mi enviado especial Steve Witkoff tuvo una reunión muy productiva con el presidente ruso Vladimir Putin, ¡y se ha logrado un gran avance! Más tarde, informé a algunos de nuestros aliados europeos sobre los últimos desarrollos. Todos están de acuerdo en que es necesario poner fin a esta guerra, y nos esforzaremos por lograrlo en los próximos días y semanas. ¡Gracias por su interés en este asunto!".
Según lo informado por el New York Times a partir de dos fuentes informadas, Trump planea reunirse con Putin en persona la próxima semana, en un encuentro que podría abrir la puerta a una cumbre trilateral entre Trump, Putin y Zelensky más adelante.
El periódico reveló que estos planes se discutieron durante las comunicaciones entre el presidente estadounidense y varios líderes europeos hoy.
En Moscú, Yuri Ushakov, asistente del presidente ruso, anunció que Putin recibió al enviado estadounidense Steve Witkoff y confirmó que "el diálogo fue útil y constructivo", señalando que "la parte rusa envió señales sobre el tema ucraniano y, a su vez, recibió señales del presidente Trump".
Cabe recordar que Trump había dado a su homólogo ruso un plazo de diez días, que termina el próximo viernes, para llegar a un acuerdo de alto el fuego en Ucrania.
El presidente estadounidense advirtió sobre la imposición de nuevas sanciones a Moscú si estos esfuerzos fracasan, enfatizando que Estados Unidos no dudará en presionar a Rusia si no acepta un acuerdo de paz con Kiev.
Estos movimientos se producen en un momento en que aumentan las presiones internacionales para poner fin a la guerra, con la esperanza de que las reuniones previstas den lugar a un avance real hacia la paz en Europa del Este.