Irán niega su desviación nuclear y anuncia la reanudación de las negociaciones con Estados Unidos el domingo.

En una nueva entrevista televisiva, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Ismael Baqaei, negó la veracidad del reciente informe del Organismo Internacional de Energía Atómica, calificándolo de "político" y "no objetivo", asegurando que Irán no ha cometido ninguna desviación o violación de sus compromisos nucleares. Baqaei explicó que el informe se basa en suposiciones mentales y no en hechos, señalando que las declaraciones del director del organismo, Rafael Grossi, sirven a los intereses de la parte contraria. Baqaei añadió que el expediente nuclear de Irán ha sido político desde el principio, reafirmando que su país sigue defendiendo sus derechos, especialmente el derecho al enriquecimiento de uranio. Explicó que el enriquecimiento no es una cuestión de prestigio, sino una necesidad científica crucial para Irán, y que en caso de existir un plan de cooperación regional en este ámbito, Teherán está dispuesto a participar. En una respuesta indirecta a las amenazas del organismo, el portavoz afirmó que Irán responderá adecuadamente a cualquier decisión tomada por el Consejo de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica. Un informe confidencial publicado en mayo señaló un aumento en el stock de uranio enriquecido de Irán hasta un 60%, un nivel cercano al límite para la fabricación de armas nucleares. En el ámbito diplomático, fuentes diplomáticas confirmaron que Alemania, Francia, el Reino Unido y Estados Unidos presentaron una resolución condenando a Irán ante el Consejo de Gobernadores del organismo, esperando que sea votada en una sesión programada para el miércoles en Viena. Al mismo tiempo, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán anunció que una nueva ronda de negociaciones con Washington se reanudará el domingo, a pesar de las discrepancias en las declaraciones estadounidenses sobre la fecha de la reunión, ya que el presidente Donald Trump sugirió la posibilidad de que se lleve a cabo el jueves, mientras que otras fuentes esperaban el viernes o sábado. Sin embargo, Baqaei afirmó que el domingo es la fecha límite para reanudar el diálogo. Estas conversaciones se producen en medio de un estancamiento continuo debido a las disputas sobre el enriquecimiento de uranio, con Teherán insistiendo en su derecho en virtud del Tratado de No Proliferación Nuclear, mientras que Washington considera que es una "línea roja".