Un estudio científico revela la capacidad de la resonancia magnética para medir la velocidad del envejecimiento

Un estudio científico reciente ha revelado la posibilidad de determinar la velocidad del envejecimiento biológico del cuerpo a través de una sola imagen del cerebro utilizando resonancia magnética, donde los investigadores han desarrollado una nueva herramienta capaz de predecir riesgos de salud futuros como demencia, enfermedades cardíacas y muerte prematura.
El Dr. Ahmed Al-Hariri, profesor de psicología y neurociencia en la Universidad de Duke y supervisor principal del estudio publicado en la revista Nature Aging, explicó que esta herramienta llamada DunedinPACNI ofrece un método innovador para medir el ritmo del envejecimiento en cualquier etapa de la vida utilizando datos de imágenes neurológicas.
El estudio se basó en el análisis de datos de un grupo de participantes en Nueva Zelanda que han sido seguidos desde el nacimiento hasta la mediana edad, donde los investigadores examinaron imágenes de resonancia magnética de sus cerebros a los 45 años utilizando técnicas de inteligencia artificial para estudiar los cambios estructurales en el cerebro y relacionarlos con otros indicadores de envejecimiento como las funciones físicas y cognitivas.
Los resultados confirmaron que las personas que muestran signos de envejecimiento cerebral acelerado son más propensas a sufrir enfermedades crónicas, lo que coincide con lo que han concluido herramientas de medición del envejecimiento anteriores como DunedinPACE que se basan en análisis genéticos.
Para asegurar la precisión de los resultados, los investigadores probaron la nueva herramienta en conjuntos de datos diversos que incluían decenas de miles de imágenes de resonancia magnética de diferentes fuentes alrededor del mundo, demostrando su efectividad en la estimación de las tasas de envejecimiento a través de diferentes grupos de edad y raza.
Los expertos consideran que esta herramienta representa una adición importante en el campo de la medicina preventiva, ya que puede contribuir al desarrollo de métodos diagnósticos más precisos para la detección temprana de enfermedades relacionadas con el envejecimiento, abriendo nuevas perspectivas para intervenciones médicas personalizadas.