Advertencia de la ONU sobre una catástrofe humanitaria sin precedentes en Gaza
August 22, 202558 VistasTiempo de lectura: 2 minutos

Tamaño de fuente
16
En el primer reconocimiento oficial de este tipo en Oriente Medio, las Naciones Unidas han confirmado que más de medio millón de personas en Gaza ya viven en condiciones de hambruna total, enfrentándose a "hambre extrema y muerte por desnutrición". Este anuncio se produjo en un nuevo análisis emitido por la Clasificación Integrada de Fases de Seguridad Alimentaria (IPC), que advierte que la hambruna se extenderá desde la ciudad de Gaza hasta Deir al-Balah y Jan Yunis en las próximas semanas.
640 mil personas enfrentarán niveles catastróficos de hambre para septiembre de 2025. Y 1.14 millones de personas en fase de emergencia (fase cuatro de hambre). Y 12 mil niños sufren de desnutrición aguda - la cifra más alta de la historia, con un aumento de 6 veces desde principios de 2025. Y el 25% de los niños sufren de desnutrición aguda. Y 55 mil mujeres embarazadas y lactantes sufren de desnutrición que amenaza la vida, se espera que esto ocurra para mediados de 2026.
Gaza ya no puede alimentarse a sí misma, ya que el 98% de las tierras agrícolas están dañadas o son inaccesibles y hay un colapso casi total del sistema de mercados y servicios, con precios de alimentos alcanzando niveles récord. Y hay una grave escasez de combustible y agua necesaria para cocinar.
Las cuatro organizaciones de la ONU (FAO, UNICEF, Programa Mundial de Alimentos y OMS) han pedido un alto el fuego inmediato y duradero - como condición esencial para cualquier solución humanitaria. Y un acceso sin restricciones a la ayuda a través de todos los puntos de cruce, apoyo urgente al sector salud, agua potable y saneamiento, y la recuperación de la producción alimentaria local y el comercio básico.
Esta hambruna no es un accidente natural, sino una consecuencia directa de un bloqueo que ha durado 18 años y operaciones militares recurrentes que han destruido la infraestructura y una restricción deliberada del flujo de ayuda y bienes esenciales, así como un ataque sistemático al sector agrícola y de salud.
Las soluciones técnicas ya no son suficientes. Se requiere una presión internacional sin precedentes para obligar a Israel a abrir los cruces y superar la burocracia en los procesos de inspección y retraso, así como financiamiento urgente para programas de nutrición y atención médica y responsabilidad legal para los responsables de este crimen humanitario.
640 mil personas enfrentarán niveles catastróficos de hambre para septiembre de 2025. Y 1.14 millones de personas en fase de emergencia (fase cuatro de hambre). Y 12 mil niños sufren de desnutrición aguda - la cifra más alta de la historia, con un aumento de 6 veces desde principios de 2025. Y el 25% de los niños sufren de desnutrición aguda. Y 55 mil mujeres embarazadas y lactantes sufren de desnutrición que amenaza la vida, se espera que esto ocurra para mediados de 2026.
Gaza ya no puede alimentarse a sí misma, ya que el 98% de las tierras agrícolas están dañadas o son inaccesibles y hay un colapso casi total del sistema de mercados y servicios, con precios de alimentos alcanzando niveles récord. Y hay una grave escasez de combustible y agua necesaria para cocinar.
Las cuatro organizaciones de la ONU (FAO, UNICEF, Programa Mundial de Alimentos y OMS) han pedido un alto el fuego inmediato y duradero - como condición esencial para cualquier solución humanitaria. Y un acceso sin restricciones a la ayuda a través de todos los puntos de cruce, apoyo urgente al sector salud, agua potable y saneamiento, y la recuperación de la producción alimentaria local y el comercio básico.
Esta hambruna no es un accidente natural, sino una consecuencia directa de un bloqueo que ha durado 18 años y operaciones militares recurrentes que han destruido la infraestructura y una restricción deliberada del flujo de ayuda y bienes esenciales, así como un ataque sistemático al sector agrícola y de salud.
Las soluciones técnicas ya no son suficientes. Se requiere una presión internacional sin precedentes para obligar a Israel a abrir los cruces y superar la burocracia en los procesos de inspección y retraso, así como financiamiento urgente para programas de nutrición y atención médica y responsabilidad legal para los responsables de este crimen humanitario.