El Ministerio del Interior sirio emite una aclaración sobre la incursión israelí en un pueblo en las afueras de Damasco.

El Ministerio del Interior sirio emitió un comunicado en el que detalla los pormenores y las repercusiones de la reciente incursión israelí en la aldea de Beit Jinn, en la provincia rural de Damasco.
El comunicado revela que "en medio de las violaciones recurrentes cometidas por las fuerzas de ocupación israelí, tropas militares israelíes, compuestas por tanques, transportes de tropas y vehículos blindados, acompañadas por drones de reconocimiento, penetraron en la aldea de Beit Jinn, en la zona de Qatana en la provincia de Damasco".
Agregando que "la fuerza ocupante llevó a cabo operaciones de allanamiento y arresto que afectaron a varios ciudadanos, resultando en el secuestro de siete personas. Este recrudecimiento se vio acompañado de disparos directos contra los habitantes de la aldea, lo que resultó en la muerte de un civil. Los secuestrados fueron trasladados al interior de territorio ocupado y su destino sigue siendo desconocido hasta el momento".
El comunicado enfatiza que "estas provocaciones recurrentes constituyen una flagrante violación de la soberanía de la República Árabe Siria, una clara violación de las leyes y tratados internacionales, y prácticas que no pueden conducir a la estabilidad en la región, sino que solo generarán más tensión y disturbios".