Las tensiones en Oriente Medio están impulsando el precio del petróleo al alza... y hay temores de una crisis de suministro si el conflicto se prolonga.

Los precios del petróleo experimentaron un notable aumento durante las operaciones del lunes 16 de junio, impulsados por el aumento de las tensiones entre Irán e Israel después de intercambiar ataques, lo que ha generado preocupaciones sobre la expansión del conflicto y su impacto en el flujo de petróleo desde Oriente Medio.
Los contratos futuros del crudo Brent subieron un 1.16% alcanzando un precio de 75.10 dólares por barril, mientras que el crudo West Texas Intermediate saltó un 1.34% llegando a 73.96 dólares. Ambos crudos registraron mayores ganancias durante la sesión, superando los 4 dólares en un momento anterior.
Este aumento sigue a un gran salto en el cierre del viernes pasado, donde los crudos subieron un 7%, después de haber aumentado más del 13% durante la misma sesión, alcanzando sus niveles más altos desde enero.
Las recientes tensiones entre Israel e Irán han generado preocupaciones sobre la interrupción del tráfico de petróleo a través del Estrecho de Ormuz, un paso estratégico por donde pasan entre 18 y 19 millones de barriles diarios, aproximadamente una quinta parte del consumo mundial de crudo, condensados y combustibles.
Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump expresó su esperanza de lograr un alto el fuego entre ambas partes, señalando que los países "a veces se ven obligados a luchar hasta el final". Trump reafirmó el apoyo de Washington a Israel, pero no reveló si le pidió detener los ataques contra Irán.
En un contexto relacionado, el canciller alemán Friedrich Merz expresó su expectativa de que los líderes del G7, durante su reunión en Canadá hoy, logren un acuerdo que contribuya a calmar la situación y evitar un mayor conflicto.
Según la agencia Reuters, un funcionario familiarizado con los esfuerzos de mediación informó que Irán ha comunicado a Qatar y Omán su falta de disposición a negociar un alto el fuego mientras siga siendo objeto de ataques israelíes, en medio de crecientes temores sobre la expansión del conflicto en la región.
Irán, miembro de la OPEP, produce alrededor de 3.3 millones de barriles diarios y exporta más de dos millones de barriles de petróleo y combustible.
Los analistas consideran que la capacidad de la OPEP y sus aliados, encabezados por Rusia, para compensar cualquier déficit en el suministro casi iguala la producción iraní, lo que aumenta la sensibilidad del mercado ante posibles perturbaciones.