Una alegría se convierte en vergüenza... Un aficionado egipcio baila desnudo y comienzan las investigaciones.
May 17, 202523 VisitasTiempo de lectura: 2 minutos
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En una escena que generó un amplio debate en las redes sociales, el Ministro de Juventud y Deportes egipcio, el Dr. Ashraf Sobhi, decidió abrir una investigación urgente sobre un incidente inapropiado de animación que tuvo lugar en un partido de fútbol de segunda división, donde un aficionado se desnudó por completo y bailó en celebración de la victoria de su equipo, desencadenando una ola de enojo y descontento popular y oficial.
El incidente ocurrió el jueves por la noche, durante el encuentro entre el Club Malia Kafr El-Zayat y el Club Tala, en el marco de la competición de segunda división, que terminó con una contundente victoria de Malia Kafr El-Zayat por 5-0, acercándose al ascenso a la liga de profesionales.
Pero no solo se centró en el resultado, sino en un aficionado que celebró de manera "impactante", mostrado en un video quitándose toda la ropa y bailando con entusiasmo entre los aplausos de algunas personas en las gradas, lo que llevó al Ministro Sobhi a intervenir personalmente.
El Ministro de Deportes emitió instrucciones al Director de la Dirección de Juventud y Deportes de la Gobernación de Gharbia para investigar rápidamente y tomar las medidas necesarias sobre la conducta "incivilizada", además de encargar al Jefe del Sector Deportivo comunicarse con la Federación Egipcia de Fútbol para seguir oficialmente la situación.
La sorpresa fue que el incidente no se detuvo en las críticas en línea, ¡sino que se convirtió en una crisis familiar! El aficionado reveló más tarde haber sido duramente reprendido por su familia, su relación con su esposa se derrumbó, quien pidió el divorcio, mientras que su hija expresó su gran enojo, lo que algunos describieron como "un alto precio por una pasión futbolística que se salió de control".
El incidente rápidamente encabezó las listas de tendencias en Egipto, con divisiones entre quienes consideran que la conducta merece castigo y otros que la ven como una "alegría fuera de lo común".
¿El aficionado cruzó los límites de la animación adecuada? ¿O fue un momento de alegría espontánea que le costó caro? Las investigaciones y decisiones futuras serán determinantes en esta extraña historia.
