La autoridad de radiodifusión israelí informó que Tel Aviv coordinó completamente con los Estados Unidos para llevar a cabo un ataque aéreo a instalaciones nucleares vitales en Irán.
Un alto funcionario israelí anunció que el presidente estadounidense Donald Trump informó al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu sobre la hora del ataque la noche del viernes, y se informó de una llamada telefónica entre ellos después de la operación.
En un comunicado oficial, el ejército israelí enfatizó la aplicación de restricciones de seguridad pública después del ataque, incluido el cierre de escuelas y lugares de trabajo, excepto para sectores esenciales, para preservar la seguridad interna.
Fuentes iraníes anónimas confirmaron que las fuerzas estadounidenses bombardearon las instalaciones nucleares en Fordo, Natanz e Isfahán en la madrugada del domingo, según informó el periódico "The New York Times".
El presidente estadounidense, a través de su cuenta en "Truth Social", afirmó que el ataque realizado por aviones de guerra estadounidenses a las tres instalaciones fue exitoso, agregando que los aviones ahora están fuera del espacio aéreo iraní camino a sus bases de manera segura.
Describiendo la operación como la más grande de cualquier fuerza militar en el mundo, Trump declaró: "Es hora de la paz", instando a Irán a aceptar el fin de la guerra de inmediato.
Este ataque se produce en el décimo día de confrontación entre Irán e Israel, en un peligroso aumento de la escalada en el conflicto regional que redefine el mapa del conflicto y sitúa a la región al borde de un enfrentamiento más amplio.