En una advertencia de extrema gravedad, el director de la Organización Mundial de la Salud, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció ayer miércoles que la Franja de Gaza está experimentando una situación de hambruna colectiva debido al bloqueo impuesto por Israel desde marzo de 2025, confirmando que la desnutrición en la región ha alcanzado niveles mortales.
La organización informó que 21 niños menores de cinco años han muerto este año debido al hambre y la desnutrición.
Por otro lado, el gobierno israelí negó su responsabilidad en la crisis alimentaria, donde su portavoz, David Mincor, declaró que "no hay hambruna en Gaza causada por Israel", acusando a Hamas de ser responsable de la escasez artificial de alimentos al impedir su distribución y saquearlos.
Ante esta situación, más de 100 organizaciones no gubernamentales, incluidas Médicos Sin Fronteras, Amnistía Internacional, Oxfam y Médicos del Mundo, han lanzado una advertencia sobre la posible propagación de una hambruna colectiva en Gaza, exigiendo un cese inmediato del fuego, la apertura de los pasos fronterizos y garantizar el flujo de ayuda humanitaria sin obstáculos.
Estas organizaciones afirmaron en un comunicado conjunto que grandes cantidades de alimentos, medicinas, agua, materiales de refugio y combustible siguen bloqueados fuera de la región o almacenados dentro de ella, sin poder llegar a los necesitados debido a las restricciones impuestas.
Este comunicado se produce después de que la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas acusara al ejército israelí de matar a más de mil personas mientras intentaban llegar a los puntos de distribución de ayuda desde finales de mayo, la mayoría cerca de instalaciones de la Fundación Humanitaria de Gaza, una organización cuya fuente de financiación es un misterio a pesar de su apoyo declarado de Estados Unidos e Israel.
El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, describió la situación en Gaza como "sin precedentes en la historia moderna", señalando que el número de muertos y el alcance de la destrucción superaron todas las expectativas.
Fuentes médicas palestinas informaron el miércoles que 10 personas murieron en las últimas 24 horas debido a la hambruna y la desnutrición, elevando el número de víctimas del hambre desde el inicio del año a 111 personas.
Agregaron que 25 niños murieron en los últimos tres días, mientras que alrededor de 900,000 niños sufren de hambre, incluidos 70,000 que han entrado en una etapa aguda de desnutrición.
La situación humanitaria ha alcanzado un nivel de deterioro sin precedentes, con aproximadamente un tercio de la población de Gaza privada de alimentos durante varios días consecutivos, según el Programa Mundial de Alimentos.
Israel impuso un bloqueo total sobre la región el 2 de marzo, después de que fracasaran las negociaciones para extender el alto el fuego que duró seis semanas.
Hasta finales de mayo, Israel prohibió la entrada de cualquier mercancía antes de permitir la entrada de un número limitado de camiones.
Con el agotamiento de las existencias acumuladas durante el período de tregua, Gaza enfrenta la peor crisis de suministros desde el inicio de la guerra hace más de 21 meses.