Colombia lanza un despliegue militar intensivo tras ataques mortales que dejaron 18 muertos

Colombia experimentó el jueves una ola de violencia mortal tras dos ataques separados perpetrados por grupos armados, que dejaron al menos 18 muertos y decenas de heridos, en un incidente que destaca el aumento de la violencia que ha persistido durante décadas en el país.
Los ataques ocurrieron en la ciudad de Cali, en el suroeste del país, y en la región de la finca de coca, en el noroeste, lo que representa un nuevo desafío para el frágil proceso de paz del país antes de las elecciones programadas para el próximo año.
En detalle, un camión bomba estalló el jueves por la tarde cerca de una base aérea en Cali, la tercera ciudad más grande de Colombia, lo que resultó en la muerte de al menos seis personas y 60 heridos, según informaron las autoridades locales.
El alcalde de Cali, Alejandro Eder, describió el incidente como "un ataque terrorista relacionado con las drogas", y pidió un aumento en el despliegue de fuerzas de seguridad en la ciudad.
Por su parte, el presidente colombiano, Gustavo Petro, comentó sobre el incidente a través de la plataforma "X", diciendo: "Estamos enfrentando una mafia internacional con bandas armadas", añadiendo que "el golpe que sufrieron los habitantes de Cali fue sin duda profundo, brutal y aterrador".
El comandante de las fuerzas armadas, el general Hugo López, anunció que "aviones de la fuerza aérea... están llevando a cabo misiones de reconocimiento y vigilancia en la zona" alrededor de la base atacada, señalando que el ejército "ha desplegado todas sus fuerzas" y ha reforzado su presencia con artillería y operaciones aéreas.
Por su parte, la fiscalía informó sobre la detención de dos hombres "sospechosos de haber participado en la explosión de artefactos explosivos" en el lugar.
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, culpó al grupo armado "E.M.C." disidente de las "Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia" (FARC), por el ataque, describiéndolo como "un ataque terrorista injustificable... contra la población civil en Cali".
Sánchez dijo: "Este cobarde ataque a los civiles es una reacción desesperada ante la pérdida de control sobre el tráfico de drogas" en la región.
En un ataque separado el jueves por la mañana, a unos 150 kilómetros de Medellín, los enfrentamientos y un ataque con un dron que apuntó a un helicóptero que apoyaba operaciones de la compañía contra las drogas resultaron en un alto número de víctimas.
El gobernador de la región de Antioquia (noroeste), Andrés Julián Rendón, informó el jueves por la noche que el número de muertos había aumentado de ocho a 12 policías.
La agencia de noticias francesa citó a un funcionario de la policía diciendo que los atacantes "acosaron" a un grupo de personas encargadas de erradicar los cultivos de coca.
Este ataque fue atribuido a la banda "Calarca" surgida del grupo "E.M.C.".
El presidente Petro, que busca mediar en acuerdos de paz con la mayoría de los grupos armados en Colombia, comentó sobre el segundo ataque diciendo a través de "X": "Las autoridades colombianas incautaron una tonelada y media de cocaína del Clan del Golfo, y su respuesta fue derribar un helicóptero de la policía".