El Banco Central de Siria emitió una decisión de revocar las licencias de las empresas "Al Fadel" y "Al Mutahida" de cambio, sin especificar las razones detrás de esta medida sorpresiva, limitándose a confirmar la adopción de medidas legales para proteger los derechos del banco.
Según una copia de la decisión, el banco encargó al Departamento Legal seguir los procedimientos necesarios para preservar sus derechos en caso de que existan reclamaciones legales contra las dos empresas cuyas licencias han sido revocadas.
La decisión también insta a esperar antes de liberar las reservas de efectivo congeladas de las dos empresas, hasta que se resuelvan y clasifiquen todas las obligaciones financieras de acuerdo con las leyes y regulaciones vigentes.
Se ha decidido liquidar oficialmente las dos empresas bajo la supervisión directa del Banco Central de Siria, aplicando los procedimientos legales vigentes en tales casos.
En un desarrollo notable, fuentes revelaron sospechas en torno a las dos empresas relacionadas con presuntas conexiones con actividades afiliadas al partido libanés Hezbollah, sin que las autoridades oficiales confirmen la veracidad o detalles de esas acusaciones hasta el momento.
Esta medida se enmarca en los esfuerzos del Banco Central para regular el mercado de cambio y perseguir cualquier práctica ilegal que afecte la seguridad financiera y económica del país, en medio de un aumento en la supervisión de las empresas de transferencias y cambio de efectivo.