El tribunal británico resuelve el misterio de un crimen de 58 años

Un tribunal en Gran Bretaña condenó a un hombre llamado Rowland Haigh, de 92 años, a cadena perpetua después de ser declarado culpable de violar y asesinar a Louisa Den, una viuda de 75 años, en un crimen que ocurrió en 1967.

Haigh tenía 34 años en el momento del crimen, cuando se encontró a la víctima estrangulada hasta la muerte en su casa en la ciudad de Bristol, en el sur de Inglaterra.

La policía logró resolver el caso décadas más tarde gracias al avance en las técnicas forenses y análisis de ADN, lo que permitió identificar al culpable y llevarlo a juicio más de medio siglo después del crimen.

Este caso refleja los esfuerzos continuos de la policía británica para reabrir casos antiguos utilizando tecnología moderna, lo que permite lograr justicia para las víctimas incluso décadas después de ocurrido el crimen.