El miércoles 30 de julio, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció la imposición de amplias sanciones a más de 50 individuos y entidades, además de más de 50 buques comerciales vinculados a la flota marítima propiedad de Mohsen Shemirani, hijo del asesor cercano del líder supremo iraní Ali Jamenei, Ali Shemirani.
Según un comunicado emitido por la Oficina de Control de Activos Extranjeros, estas sanciones son las más severas desde 2018, y se centran principalmente en una extensa red de petroleros y buques portacontenedores operados por la familia Shemirani, a la que Estados Unidos acusa de lavar miles de millones de dólares a través de envíos de petróleo y mercancías desde Irán y Rusia, la mayoría hacia China.
El Departamento afirmó que la red utilizó pasaportes extranjeros y empresas ficticias para encubrir sus actividades en todo el mundo, y algunas de las embarcaciones se vieron involucradas en el transporte de misiles y drones a Rusia a cambio de petróleo ruso, mientras Mohsen Shemirani controla una amplia red de buques a través de una compleja red de intermediarios.
El nuevo paquete de sanciones incluyó la imposición de sanciones a 15 compañías navieras, 52 buques, 12 individuos y 53 entidades en 17 países de todo el mundo, como parte de los esfuerzos intensificados de Washington en la campaña de 'máxima presión' contra Teherán tras sus ataques aéreos a instalaciones nucleares iraníes en junio pasado.
Las sanciones llegan en un momento en el que el régimen iraní se niega a reanudar las negociaciones diplomáticas con Washington, con advertencias del presidente estadounidense Donald Trump de lanzar nuevos ataques si Irán intenta reactivar su programa nuclear.
La portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Tammy Bruce, afirmó que el objetivo de las sanciones es 'paralizar la capacidad del régimen iraní para financiar sus actividades desestabilizadoras', subrayando que cualquier entidad que haga negocios con el petróleo iraní se expone al riesgo de sanciones estadounidenses.
Estados Unidos impuso sanciones a Ali Shemirani en 2020, mientras que la Unión Europea impuso sanciones similares a su hijo en julio de 2025 debido a su papel en el comercio de petróleo ruso.
Hasta ahora, los mercados energéticos mundiales se mantienen estables, según un funcionario estadounidense que aseguró que las medidas están diseñadas para apuntar a entidades específicas sin dañar los mercados petroleros.