Argelia: El hospital de Médéa impone estrictas restricciones en la vestimenta de los empleados y visitantes, generando un amplio debate.

En un paso que ha generado un amplio debate entre los argelinos, la administración del hospital público de la provincia de Médéa impuso estrictas restricciones sobre la vestimenta de los empleados y visitantes de los pacientes, prohibiendo el uso de pantalones cortos, faldas cortas, blusas reveladoras o cualquier prenda considerada "indecente o inapropiada". La circular emitida hace unos días instruyó a todo el personal del hospital a cumplir con un código de vestimenta respetuoso con la ley interna y las normas de conducta en espacios públicos. A pesar de las críticas en las redes sociales, donde algunos consideraron que la vestimenta es una libertad personal en la que el hospital no debería intervenir, otros instaron a centrarse en mejorar los servicios médicos en lugar de imponer restricciones sobre la ropa. El abogado Farid Sabri explicó que la ley no especifica un uniforme particular para los empleados o visitantes, excepto en algunos sectores que requieren un atuendo formal, y que los reglamentos internos de cada institución establecen reglas de vestimenta basadas en disciplina, limpieza y seguridad. También señaló que las instituciones pueden prohibir la entrada a quienes vistan de manera inapropiada, con un criterio especial al respecto. Desde un punto de vista social, el experto Abdelhafid Sendouki afirmó que respetar los límites de vestimenta en lugares públicos refleja la naturaleza y cultura de la sociedad, y es mejor cumplir con ellos, especialmente en instituciones públicas. Fuentes del Ministerio de Salud argelino indicaron que las directrices sobre la vestimenta se emitieron siguiendo instrucciones de la autoridad de tutela y no solo por parte del hospital. Este fallo se produce en medio de un debate continuo sobre la libertad personal y los controles sociales en Argelia, lo que convierte el tema de la vestimenta en lugares públicos en un asunto delicado que genera divisiones en la opinión pública.