Trump revela el escudo "Cúpula Dorada" con un costo de 175 mil millones de dólares.
May 20, 2025152 VistasTiempo de lectura: 2 minutos
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El presidente estadounidense Donald Trump anunció el inicio de la implementación de un proyecto de defensa masivo llamado "Cúpula Dorada", que tiene como objetivo establecer un escudo antimisiles avanzado para proteger a los Estados Unidos de cualquier ataque de largo alcance, incluidos los provenientes del espacio. Trump explicó durante un discurso desde la Casa Blanca que este proyecto se completará en tres años, con un costo estimado de 175 mil millones de dólares, enfatizando que todos sus componentes serán fabricados dentro de los Estados Unidos, lo que lo convierte en una inversión doble en seguridad y economía nacional. Afirmó que la "Cúpula Dorada" representará un avance en las capacidades de defensa aérea y de misiles de Estados Unidos, al interceptar cualquier misil dirigido a su territorio, incluso si es lanzado desde fuera de la atmósfera. Señaló que esta tecnología será única y no será poseída por ningún otro país. El general Michael Guetlein, vicepresidente de la Fuerza Espacial de Estados Unidos, supervisará el proyecto, mientras que el secretario de Defensa, Mark Esper, indicó que este sistema "cambiará las reglas del juego" a favor de Estados Unidos, considerándolo una de las inversiones en defensa estratégica más poderosas de la historia reciente. Este anuncio se produce en un momento de crecientes tensiones geopolíticas, con críticas de Rusia y China, donde Moscú comparó el proyecto con la "Guerra de las Galaxias", haciendo referencia a las iniciativas militares espaciales estadounidenses durante la Guerra Fría en la era de Ronald Reagan. A pesar de la similitud en el nombre con la "Cúpula de Hierro" israelí, el sistema de Trump supera en alcance y capacidad, ya que apunta a interceptar misiles balísticos y ataques espaciales de largo alcance, no a ataques cortos como el sistema israelí. Trump explicó que la "Cúpula Dorada" fue parte de sus promesas electorales, y hoy se convierte en una realidad fortalecida por la experiencia de las industrias de defensa estadounidenses. Este proyecto, además de sus ambiciones políticas, parece abrir una nueva etapa en la carrera armamentista espacial, en medio de una amplia expectación internacional.