La Casa Blanca acusó al líder iraní Ali Jamenei de intentar salvar su reputación después de minimizar el impacto de los recientes ataques militares estadounidenses a las instalaciones nucleares de Irán, en su primera aparición desde la reciente escalada militar.
La portavoz de la Casa Blanca, Carole Levitt, dijo en una conferencia de prensa: "Vimos el video del Ayatolá... y cuando tienes un sistema integral, debes mantener tu reputación", en referencia a lo que Washington considera un intento de Jamenei de minimizar las pérdidas y efectos del ataque estadounidense.
Jamenei declaró en un discurso televisado que Estados Unidos "no logró ningún logro" en los ataques realizados contra Irán durante la reciente guerra con Israel, afirmando que su país dio lo que describió como una "bofetada en la cara de Estados Unidos".
El presidente estadounidense Donald Trump fue acusado de buscar una "demostración" mediática, minimizando la efectividad de esos ataques, diciendo que "Washington exageró la importancia de sus ataques a nuestras instalaciones nucleares".
Jamenei también señaló que Irán demostró su capacidad para atacar las bases estadounidenses en la región, señalando que el ataque a la base "Al-Asad" causó grandes daños, y que cualquier nuevo ataque a Irán "será respondido con ataques repetidos a las bases estadounidenses".
Asimismo, el líder iraní afirmó que las fuerzas de su país lograron penetrar las defensas israelíes y lanzaron ataques a áreas militares y civiles dentro de Israel, diciendo que los ataques "destruyeron las capacidades militares israelíes" y que "Tel Aviv no esperaba recibir duros golpes de Teherán".
Estas declaraciones, que se produjeron después de los ataques estadounidenses, fueron consideradas por la administración estadounidense como un intento de minimizar la respuesta militar estadounidense y mantener la imagen de Irán ante su pueblo y el mundo, en medio de las crecientes tensiones en la región.