A pesar de la escalada militar en el Golfo, fuentes citadas por la agencia "Reuters" aseguraron que los envíos y la producción de Qatar Energy no se vieron afectados por el ataque iraní a la base aérea Al Udeid, una de las bases militares más importantes de la región.
La agencia informó que las operaciones en la empresa continúan con normalidad sin interrupciones en la producción o retrasos en la exportación, a pesar de las tensiones de seguridad agudas tras el ataque sorpresivo con misiles por parte de la Guardia Revolucionaria Iraní.
Qatar condenó en términos enérgicos el ataque iraní, señalando en un comunicado oficial que constituye "una violación flagrante de su soberanía y de su espacio aéreo, y una clara violación del derecho internacional".
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar confirmó que los misiles fueron interceptados con éxito sin registrar ninguna lesión, y que el espacio aéreo de Qatar ahora es seguro.
Cabe destacar que la base aérea Al Udeid alberga el Centro de Operaciones Aéreas Conjuntas responsable del comando de las fuerzas aéreas en la región, así como el Ala Aérea 379, la mayor ala de intervención aérea rápida en el mundo.
El ataque iraní se produjo menos de 24 horas después de un ataque militar sorpresa lanzado por Estados Unidos que apuntó a tres instalaciones nucleares iraníes el domingo por la mañana, exacerbando la situación de tensión en el Golfo.
En un desarrollo relacionado, Arabia Saudita expresó su pleno apoyo a Qatar, confirmando que respalda todas las medidas que Doha tome para proteger su soberanía contra "la agresión iraní".
Estos acontecimientos continúan desarrollándose en la región en medio de una vigilancia internacional sobre la crisis, especialmente dada la sensibilidad de los objetivos atacados y las posibles repercusiones en los mercados energéticos mundiales.