Qatar condena las violaciones israelíes en Siria y pide una acción internacional urgente

El estado de Qatar condenó enérgicamente las políticas israelíes que violan el derecho internacional, incluidos los repetidos ataques en territorio sirio, considerándolos una seria amenaza para la paz y la seguridad regional e internacional.
Esto ocurrió durante la sesión de emergencia del Consejo Ejecutivo de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, solicitada por Qatar para discutir los ataques israelíes y su impacto en la implementación del Convenio sobre Armas Químicas.
El Sr. Mutlaq bin Majid Al-Qahtani, delegado de Qatar ante la organización, describió estos ataques como "una clara violación del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, especialmente el Artículo (2) que prohíbe el uso de la fuerza o la amenaza de la misma contra la soberanía de los estados". También señaló que "Israel está obligado a abstenerse de cualquier acción que obstaculice el logro de los objetivos del Convenio sobre Armas Químicas, en virtud del Artículo (18) de la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados", afirmando que "cualquier interferencia con los objetivos del convenio constituye una violación legal de la que Israel es responsable".
Al-Qahtani instó a la comunidad internacional a "condenar estos actos y tomar medidas efectivas para detenerlos", llamando a proteger la soberanía de Siria y garantizar la continuación del proceso de verificación y desmantelamiento químico. También propuso el envío de una "misión técnica de campo" para evaluar los sitios atacados, documentar los daños y estudiar su impacto en el trabajo de la organización, como preparación para la rendición de cuentas legal.
Cabe recordar que el Convenio sobre Armas Químicas entró en vigor en Siria el 14 de octubre de 2013, un mes después de que el gobierno sirio acordara destruir su arsenal químico, tras el ataque químico en Ghouta Oriental en agosto de 2013, en el que se utilizó gas sarín y causó la muerte de más de 1500 civiles, incluidos niños y mujeres.
A pesar de que la organización anunció en enero de 2016 la destrucción de todas las armas químicas declaradas, sus informes continuaron registrando sospechas sobre la producción por parte del régimen de nuevas armas químicas, como en el ataque de Douma en 2018, que dejó decenas de víctimas y obstaculizó las investigaciones de la organización.