Protestas en Hasaka contra el aumento de los precios de la electricidad.. y acusaciones a las "FSD" de cargar a los ciudadanos con cargas adicionales

La ciudad de Hasaka presenció el jueves por la noche amplias protestas que incluyeron el cierre de decenas de tiendas y el corte de carreteras principales en rechazo a la decisión de las "FSD" de aumentar el precio del amperio eléctrico de 7 a 20 dólares, con un aumento cercano al 200%. La decisión entrará en vigor a principios del próximo agosto.
La "Televisión de Siria" informó que el cierre incluyó tiendas, oficinas de cambio y empresas de transferencias financieras, además del mercado principal del barrio de Al-Mufti, en una medida considerada por los manifestantes como una respuesta a la "decisión injusta". Se citó a uno de los participantes diciendo: "El costo de 5 amperios alcanzará los 100 dólares, equivalente al alquiler mensual del local, una cantidad inaceptable en medio de la recesión económica y la disminución de las ventas".
Las protestas se extendieron a otras áreas como Tel Hajar, el mercado central y la iglesia asiria, donde los residentes llamaron a huelgas similares, amenazando con ampliar las protestas si no se revierte la decisión. Los manifestantes levantaron consignas exigiendo "suministro eléctrico, reducción de los precios del diésel y regulación de los precios de los generadores privados", en referencia al deterioro de las condiciones de vida.
Según fuentes locales, los campos de Rmelan producen más de 20 mil barriles de petróleo al día, mientras que la producción total en las áreas de la "Administración Autónoma" supera los 50 mil barriles, con algunos informes que sugieren que llega a 100 mil barriles en el noreste de Siria. Parte del petróleo crudo se exporta al gobierno sirio y a la región del Kurdistán de Irak, además de ser refinado localmente y vendido a través de estaciones de combustible afiliadas a las "FSD".
La planta sueca al sur de Rmelan produce medio millón de metros cúbicos de gas al día, mientras que la producción de la planta de gas de Jibsa en Shaddadi alcanza 1.2 millones de metros cúbicos, transportados a través de un oleoducto que se extiende hasta la campiña de Homs.
Las áreas del noreste de Siria sufren escasez de combustible, especialmente de diésel utilizado en la agricultura, la industria y la calefacción, mientras que las "FSD" suministran diésel a precios elevados (55 centavos por litro), después de haber sido tasado en 30 centavos hace dos años. Las recientes protestas se producen en el contexto del creciente estrés económico sobre la población, con acusaciones a las "FSD" de cargar a los ciudadanos con las cargas de sus políticas sin tener en cuenta las difíciles condiciones de vida.