En un desarrollo notable dentro del creciente conflicto en Sudán, Mohamed Hamdan Daglo, conocido como "Hemeti", líder de las Fuerzas de Apoyo Rápido, anunció la formación de un "Consejo Presidencial" nuevo, según un comunicado oficial emitido ayer sábado.
Hemeti prestó juramento en la ciudad de Nyala, capital del estado de Darfur del Sur, que se considera el bastión principal de sus fuerzas.
El comunicado aclaró que el consejo presidencial liderará la próxima etapa desde el lado de las fuerzas de apoyo rápido, y también se nombró a un primer ministro dentro de la nueva estructura administrativa, lo que refleja el intento de Hemeti de presentarse como un líder legítimo sobre una gran parte de Sudán, en un desafío directo a la autoridad existente liderada por el ejército sudanés.
* Batalla por el control de Darfur
A pesar del amplio control de las fuerzas de apoyo rápido sobre la mayoría de las áreas de la región de Darfur, las batallas siguen siendo intensas, especialmente en la ciudad de El Fasher, la capital histórica de la región, donde se libran enfrentamientos feroces entre las fuerzas de apoyo rápido y el ejército sudanés respaldado por facciones locales.
Las fuerzas de apoyo rápido han impuesto un asedio asfixiante a la ciudad durante más de 500 días, lo que ha llevado a una catástrofe humanitaria sin precedentes.
Cientos de miles de civiles están atrapados, sufriendo de hambre y sed, y dependen de forraje animal para sobrevivir, en medio de la ausencia de ayuda humanitaria.
* Una tragedia humanitaria continua
La Organización de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) reveló la semana pasada que más de mil niños han sido asesinados o han sufrido graves mutilaciones como resultado de los bombardeos aéreos, el fuego de artillería y los ataques terrestres.
A pesar de estas cifras alarmantes, las fuerzas de apoyo rápido afirman que "brindan a los civiles suficientes oportunidades para escapar", lo que es negado por organizaciones de derechos humanos y humanitarias.
* El ejército sudanés y un gobierno paralelo
Por otro lado, el ejército sudanés ha logrado recuperar el control de amplias áreas en el centro y este de Sudán, donde anunció la formación del primer gobierno civil desde el estallido de la guerra, y este gobierno celebró su primera reunión la semana pasada, en un paso para fortalecer la legitimidad interna e internacional.
Sin embargo, la situación sigue siendo frágil, ya que los enfrentamientos continúan en la región de Kordofán, situada entre Darfur y el centro de Sudán, donde las aldeas pequeñas están siendo atacadas repetidamente por ambas partes, lo que complica aún más la crisis de seguridad y humanitaria.
* Una crisis humanitaria que es la peor a nivel mundial
La guerra que ha continuado durante más de un año ha llevado a la mitad de la población de Sudán al borde de la hambruna, mientras que la economía se ha colapsado por completo y las epidemias se han propagado, en medio de una grave escasez de alimentos y medicinas.
A pesar de los limitados movimientos internacionales, los esfuerzos para detener la guerra siguen estancados.
La administración del presidente estadounidense Donald Trump ha indicado que está trabajando para encontrar una solución política integral, pero hasta ahora no se ha logrado ningún avance real sobre el terreno.
El conflicto sudanés, que comenzó como una lucha entre generales y terminó en una catástrofe humanitaria, se dirige hacia una mayor escalada, con la disputa de legitimidades y el aumento del sufrimiento de los civiles, en medio de un silencio internacional y regional que genera preocupación.