Netanyahu insiste en la ocupación de Gaza a pesar de la oposición interna e internacional

En un paso controvertido, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu continúa implementando su plan para ocupar completamente la ciudad de Gaza, a pesar de las severas críticas que ha enfrentado de varias partes, incluyendo la oposición dentro del ejército israelí y del presidente estadounidense Donald Trump.

En este contexto, el mando militar israelí ha emitido órdenes de reclutamiento para aproximadamente 60,000 soldados de reserva, en preparación para la operación militar destinada a controlar la ciudad de Gaza.

Este paso llega en un momento sensible, ya que se espera que alrededor de 40,000 soldados de reserva se unan a sus unidades, en el marco de una movilización de reserva no planificada para apoyar el ataque en la franja.

Según la radio del ejército israelí, este número incluirá aproximadamente la mitad de los combatientes, cada uno de los cuales asumirá un papel en los frentes, mientras que la otra mitad de los soldados llevará a cabo diversas tareas que incluyen apoyo logístico, inteligencia y aviación.

Mientras tanto, fuentes israelíes revelan una crisis interna entre los líderes de seguridad y políticos,

el jefe de estado mayor Eyal Zamir, el jefe del Mossad David Barnea, y el encargado del servicio de seguridad interna (Shabak) han expresado su rechazo al plan de ocupación total de Gaza, sugiriendo en su lugar un "acuerdo parcial" con el movimiento Hamas con el objetivo de liberar a los prisioneros israelíes a cambio de un número de prisioneros palestinos.

Según informes de prensa, Hamas ha aceptado este acuerdo que incluye un alto el fuego de 6 días a cambio de la liberación de 10 prisioneros israelíes a cambio de un número de prisioneros palestinos, con la condición de que se liberen más prisioneros más tarde, además de los cuerpos de varios prisioneros muertos.

A pesar de esas presiones y críticas, Netanyahu continúa implementando su plan que recibió apoyo del gobierno israelí y fue aprobado oficialmente en agosto pasado bajo la supervisión del ministro de defensa Israel Katz.

En un contexto relacionado, un grupo de israelíes presentó una petición ante la Corte Suprema, pidiendo que se detenga el plan de ocupación de Gaza, considerando que la decisión se tomó sin consultar adecuadamente al ejército, lo que podría perjudicar la seguridad israelí.

Por otro lado, la comunidad internacional ha advertido ampliamente sobre los efectos de este plan, ya que muchos países occidentales y árabes y organizaciones de ayuda han denunciado las condiciones trágicas que podrían resultar de la implementación de este plan en medio de la catastrófica situación humanitaria en la franja de Gaza.

Las Naciones Unidas habían declarado oficialmente el 22 de agosto de 2025 la hambruna en la franja, donde alrededor de 500,000 personas viven en condiciones catastróficas.

En una posición sorprendente, el presidente estadounidense Donald Trump criticó la continuación de la guerra en Gaza, advirtiendo que Israel podría lograr una victoria militar pero perdería mucho en el ámbito diplomático y en las relaciones internacionales.

Trump dijo que la guerra podría causar un daño grave a la imagen de Israel en el mundo a pesar de su repetido apoyo total al derecho de Israel a defenderse contra Hamas.

Mientras los preparativos militares israelíes continúan acelerándose, la pregunta sigue siendo sobre el futuro de Gaza y el impacto de esta escalada en la seguridad regional e internacional.