Manifestaciones masivas en Bulgaria en rechazo a los planes del gobierno de unirse a la zona del euro.

Las protestas comenzaron al mediodía en la capital Sofía y otras ciudades, convocadas por el partido nacionalista extremista "Vida" y varias organizaciones de la sociedad civil, como parte de una campaña que pide un referéndum popular sobre la adhesión a la unión monetaria europea.
Los manifestantes temen que la adopción del euro provoque un aumento de los precios y erosione la soberanía económica del país, considerando que mantener el lev es preservar la "libertad de Bulgaria".
El líder del partido Vida, Konstantin Konstantinov, declaró durante la manifestación: "Tenemos una clara voluntad popular, la gente dice claramente: no queremos destruir el lev búlgaro. Queremos mantener nuestra moneda nacional y nuestra libertad, por eso pedimos el referéndum".
El presidente búlgaro, Rumen Radev, presentó una solicitud oficial al parlamento para realizar un referéndum sobre la adopción del euro como moneda oficial del país.
El Banco Central Europeo anunció en 2024 que Bulgaria no cumple actualmente los requisitos para unirse a la zona del euro debido a altas tasas de inflación que van en contra de los criterios de adhesión. A pesar de ello, el gobierno búlgaro continúa trabajando hacia la adhesión para 2026.
Bulgaria es uno de los siete países de la Unión Europea que aún no se ha unido a la zona del euro, junto con la República Checa, Dinamarca, Hungría, Polonia, Rumania y Suecia.