Irán responde a las demandas de Washington: la enriquecimiento continúa y no retrocederemos.
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El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, afirmó en sus declaraciones recientes que Irán continuará con su programa de enriquecimiento de uranio independientemente de los resultados de las negociaciones con Estados Unidos o las potencias europeas. A través de la plataforma "X", Araghchi enfatizó que Irán defiende sus derechos como miembro del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), asegurando que no hay escenario en el que el país renuncie a estos derechos. Añadió que Teherán está dispuesto a discutir un acuerdo permanente sobre su programa nuclear, pero el enriquecimiento de uranio continuará independientemente de si se llega a un acuerdo o no. Comentó sobre las declaraciones estadounidenses que rechazaron cualquier enriquecimiento de uranio por parte de Irán, diciendo que esas demandas están lejos de la realidad, y que si Washington está comprometido en evitar que Irán posea armas nucleares, están dispuestos a cooperar, pero si las demandas son poco realistas, no habrá acuerdos. El secretario de Estado de EE. UU., Steve Wietkof, había afirmado anteriormente que Washington no permitirá que Irán enriquezca uranio ni siquiera al 1%, enfatizando que esta es la "línea roja" en las negociaciones. En respuesta, Araghchi dijo que Irán no aceptará condiciones que le impidan enriquecer uranio, señalando que estas negociaciones se producen en medio de discrepancias entre las declaraciones públicas de los estadounidenses y las discusiones no anunciadas. Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán había declarado anteriormente que Teherán está dispuesto a negociar sobre el nivel de enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de sanciones, pero no aceptará detener su programa nuclear, asegurando que su derecho a la energía nuclear pacífica está protegido por el tratado internacional. Las negociaciones entre Irán y Estados Unidos continúan, bajo el patrocinio de Omán, y se han llevado a cabo varias rondas en Mascate y Roma, con la esperanza de encontrar soluciones satisfactorias para ambas partes.